Tradicionalmente un alumno inteligente o superdotado se asociaba a las buenas notas. Actualmente, cada vez más la inteligencia se define como la capacidad para adaptarse a un entorno que se desconoce y no como el tener un cociente intelectual elevado. Sin embargo cuando llega un ser superdotado al seno de una familia y no está diagnosticado, produce muchos quebraderos de cabeza.

El fracaso de los superdotados

El psicólogo Joseph Renzulli, director del Centro Nacional de Investigación de Superdotados y con talento afirma que entre un 15 y un 20% de alumnos en edad escolar son superdotados aunque la mayoría no lo saben por lo que ni administración, ni padres, ni profesores saben tratar el problema.

Los jóvenes inteligentes -afirma Renzulli- no están motivados en las escuelas con métodos tradicionales y se aburren. La verdadera igualdad de oportunidades radica en proporcionar a los jóvenes experiencias según sus niveles de habilidad y su capacidad en un entorno educacional conjunto con chicos y chicas de su edad”.

En este programa de REDES interviene también Robert Sternberg profesor de psicología de la Universidad de Yale, en EE.UU. que introduce un elemento nuevo “para mi -afirma- lo más importante es que se aprenda de las experiencias. A mis alumnos les digo que deben aprender de los errores y no repetir los mismos errores muchas veces”.

▷Ver Programa REDES emitido en RTVE el 2/03/2004◁: