Hay una violencia filio-parental que va en aumento y que suele pasar desapercibida
Se estima que el 9% de los progenitores sufren violencia física y un 40% verbal y emocional y que aunque en una gran mayoría son ellos, los varones, los que agreden, las chicas suelen comenzar antes. Para debatir y estudiar que está pasando con este preocupante tema social hoy ha comenzado el Congreso Nacional sobre violencia filio-parental donde participa Jordi Royo, director clínico de Amalgama 7, una entidad catalana que se dedica a la atención terapéutica de jóvenes y adolescentes y sus familias.
Es una violencia que muchas veces parece imperceptible
Porque no siempre implica la agresión física, sino que intervienen agresiones emocionales o psicológicas. «Es una patología camuflada como muchos años lo fue la violencia de género», dice Jordi Royo. Por ello, muchos chicos y padres no son conscientes de esta violencia.
Mediante cuestionarios, padres e hijos se dan cuenta por las respuestas que son víctimas y agresores
Entonces, «los chicos tienen tendencia a minimizar», explica el experto, «y los padres también».
«Los padres minimizan como si no se produjese» porque esta violencia les produce muchos sentimientos: vergüenza, humillación, culpa por lo que pueda pasar, tensión en la pareja… «Un 10% de los agredidos denuncian».
En el programa La Ventana de Cadena Ser