¿Qué es y cuándo empieza el calendario de adviento?
El Calendario de Adviento es un calendario de cuenta atrás. Empieza a contar el 1 de diciembre y dura hasta el 24 de diciembre (Nochebuena).
Se elabora para saber cuántos días faltan para la Navidad y, aunque en un principio está pensado para los niños y niñas, si eres fan de la Navidad también te gustará aunque no tengas pequeños en casa.
Podemos confeccionar un calendario navideño más sencillo o más elaborado, dependiendo del tiempo que queramos dedicarle. Luego solo será cuestión de meter en cada compartimento un papelito con la sorpresa que hayamos decidido para ese día. Tienes también la opción de hacerte con uno de los muchos que se comercializan. A lo largo de esta publicación te muestro unos cuantos.
¿Cuál es el origen del calendario de adviento?
El origen del calendario de adviento se remonta a la época protestante alemana, durante el siglo XIX. En aquel entonces los niños solían encender una vela cada día del periodo de adviento, desde el domingo de adviento (día que varía cada año) hasta el 24 de diciembre.
Hoy día la tradición ha cambiado un poco: el calendario suele incluir los días del 1 al 24 de diciembre y, en vez de velas, se completa con regalos o chocolatinas.
Los niños y niñas tomarán el calendario de adviento como un juego. Gracias a él no esperarán tan ansiosos los regalos del día 25 de diciembre o del día 6 de enero, sino que aguardarán con calma para poder abrir una nueva casilla cada día y llevarse su recompensa.
Que los niños aprendan a ser pacientes de pequeños es beneficioso, les servirá para tener la templanza necesaria a la hora de tomar decisiones de riesgo cuando sean mayores. Enseñarles esto a través de los juegos es ideal, porque lo que los niños aprenden jugando lo aprenden mejor y cala más hondo en su mente.
Además, el calendario de adviento será una excelente ocasión para unir a toda la familia a su alrededor. Podemos utilizarlo como un ritual navideño y juntarnos todos para abrir la cajita o la ventanita diaria tras la que se esconde el pequeño regalo.
Cómo hacer un calendario de adviento personalizado
Estas son algunas ideas fáciles para hacer nuestro calendario de adviento:
- Puede ser simplemente un panel de corcho al que enganchemos saquitos de tela que contengan el papelito con la sorpresa, poniendo por fuera el número del día con una pegatina.
- Las cajitas que contienen los regalos de los huevos de chocolate son también una opción perfecta. Basta con pintar un número diario en cada una y esconder el papelito con la sorpresa. Puedes engancharlas todas con ayuda de una cuerda.
- Un par de hueveras de cartón nos pueden servir: 24 huecos, una sorpresa diaria escrita en un papelito y con un número dibujado será todo lo necesario.
- En una cartulina puedes recortar la forma de un árbol de Navidad, y en él enganchar sobrecitos de colores que contengan la notita con la sorpresa de cada día.
- Una bandeja de cupcakes o magdalenas también puede ser la base de nuestro calendario de adviento. Los agujeros son perfectos para guardar las notitas con la sorpresa, sólo necesitarás taparlos con unas pegatinas de colores que tengan escrito el número de cada día y así abrirlos cuando correspondan. Si quieres que realmente parezca un calendario puedes colgar la bandeja en la pared, de forma vertical.
- Guarda las cajitas de cerillas o similares, después las puedes decorar y rellenar para hacer tu calendario.
Ideas de regalos para poner en vuestro calendario
Estas son algunas ideas de regalos para nuestro calendario de adviento infantil, pero seguro que se te ocurren muchas más:
- Animalitos de Schleick. Están tan bien hechos y son tan bonitos que hasta servirían como simple elemento decorativo.
- Calcomanías.
- Ceras para pintar.
- Cromos.
- Entradas para el cine.
- Entradas para un museo.
- Gomas y abalorios para el pelo.
- Hoy compraremos adornos para el árbol.
- Hoy escribiremos christmas a familia y amigos.
- Hoy hacemos el Belén.
- Hoy iremos a la biblioteca a coger libros de Navidad.
- Hoy iremos a un cuentacuentos navideño.
- Hoy iremos al mercadillo de navidad de la Plaza Mayor.
- Hoy jugaremos a juegos de mesa.
- Hoy llamaremos a alguien querido que viva lejos.
- Hoy montaremos el árbol de navidad.
- Kit para hacer pulseras.
- Marionetas de dedo.
- Material de manualidades. Dependiendo de lo que le guste y tu presupuesto, pueden ser pegatinas, hojas de colores, cartulinas especiales, marcadores o lo que sepas que le va a hacer disfrutar.
- Mini figuras Lego o Playmobil.
- Monedas de chocolate.
- Pinceles y acuarelas.
- Pintura de dedos.
- Plastilina.
- Suscripciones: a los niños les encanta recibir cartas en el buzón. ¿Por qué no animarles a la lectura suscribiéndoles a una revista de algún tema que les interese?
- Tarjetas de socio: del zoo, del museo… ¡Es un regalo familiar perfecto! Muchas familias jóvenes hacen pequeñas excursiones de este tipo cada semana, pero su precio es bastante considerable, así que las tarjetas de socio anuales pueden ser muy útiles. Son regalos excelentes para niños que nos permitirán disfrutar todo el año en familia.
- Tizas de colores para el cabello.
- Tizas de colores para pintar.
- Un calendario. A muchos niños les gusta saber qué ocurre, qué día es, cuántos días quedan para algo. Estos niños son los que quieren saber cuál es el plan del día, en qué orden van a suceder las cosas, a qué hora van a llegar los amigos, etc. Luchan contra la improvisación y puede resultar frustrante si eres un padre espontáneo. Pero, es un motivo de celebración. Estos niños tienen muchos puntos fuertes y hacen que todo sea más eficiente. Apúntate a su horario interno y cómprales un calendario. Ahí pueden anotar sus clases, citas, partidos, etc. Si te preguntan algo, diles que miren el calendario para que se acostumbren a llevar el control de su propia agenda. Incluso puedes apuntar “días espontáneos” para que sepan que ese día ocurrirá algo diferente.
- Un Cubo de Rubik.
- Un imán.
- Un libro para sacar al artista que lleva dentro.
- Un puzle.
- Un slinky.
- Un yo-yo.
- Una entrada para el parque de atracciones.
- Una taza con su nombre.
Puedes alternar regalos físicos con experiencias para los niños, seguro que les encantan:
- Vale para clases: de música, de baile, de montar a caballo, de dibujo… Las clases son una forma genial para estimular el interés de los niños y hacerles saber que prestas atención a sus cosas.
- Vale para elegir la película que ver en familia. Para el siguiente día de película familiar o para cuando él quiera darle uso. Puede ser elegir la película que ver de las que ya tienes en casa o de las que dan en televisión, cuál comprar o cuál ir a ver al cine.
- Vale por acostarse media hora más tarde. Quien dice media hora, dice una hora o quince minutos, lo que te parezca más conveniente. Puede ser para usar el día que reciba el regalo o el que él quiera, pero en este segundo caso te arriesgas a que quiera usarlo justamente un día que no te venga nada bien, y lo suyo sería ser coherente y aceptarlo. Siempre te queda la opción intermedia de que lo pueda usar el viernes o sábado que él elija. Si tu presupuesto es nulo o muy bajo, puedes repetir este regalo varios días de Adviento, cambiando el tiempo (10 minutos, media hora, una hora…).
- Vale por elegir la cena del día. Puede ser del día concreto en que reciba el vale o algo que se pueda guardar para el día que él quiera, pero en ese caso habrá que de verdad aceptarlo el día que él lo quiera usar aunque no te venga bien. Si el niño es pequeño disfrutar del vale en el día será mucho mejor para él. Tu hijo tendrá la sensación de haber recibido un regalo y no una promesa.
- Vale por invitar a un amigo o a una amiga. A una fiesta improvisada, a una merienda o a pasar la noche en casa, lo que mejor te convenga.
- Vale por un cuadernillo de juegos de ingenio.