El juego será estudiado por expertos de la Universidad de Barcelona
El objetivo es ver su efecto en museos y en lugares catalogados como patrimonio mundial por la UNESCO. Pokémon GO es el juego estrella del año. Un descubrimiento que tiene tantos seguidores como detractores. Y es que buscar Pokémons, en cualquier momento y lugar, se ha convertido en una distracción para millones de jóvenes y no tan jóvenes.
Pokémon GO es un videojuego de aventura de realidad aumentada
Consiste en buscar, capturar y luchar con los personajes de la saga, escondidos en ubicaciones del mundo real. Así que el jugador ha de desplazarse físicamente por las ciudades para progresar. Dicen sus creadores que la aplicación refuerza la interacción social, y que reduce el sedentarismo tan asociado a los videojuegos.
De ahí que los expertos de la Universidad de Barcelona, acompañados por otros especialistas de Japón y del Instituto Nacional de Antropología de Méjico, hayan iniciado un proyecto conjunto de investigación para estudiar su efecto. Se busca la identificación de experiencias y buenas prácticas de la caza Pokémon, tanto en los museos como en otros centros de arte. Porque lo cierto es que el juego está generando un acercamiento de público no habitual a estos espacios.
Es el lado más positivo del fenómeno. Claro, que también existe el lado negativo
Algunos museos y monumentos han marcado restricciones de acceso, porque consideran que las obras, y el patrimonio en general, se merece otro tipo de visitas. Los resultados de la investigación se presentarán en el Tercer Congreso Internacional de Turismo Cultural, que se celebrará en Córdoba en febrero de 2017.
De momento, la búsqueda de Pokémon se ha convertido en algo más que un simple juego. Es una auténtica revolución en el campo del ocio
Fuente: Por la educación de Radio 5 (16/09/16) / Imagen de portada: Cualquier sitio es bueno para cazar un Pokémon, por muy adulto que uno sea. ALEXANDER HEINL (EFE)