Cuentos para la vuelta al cole

Con el mes de septiembre llega cada año un gran reto: la vuelta al cole.  Algunos niños y niñas empiezan la escuela por primera vez, otros volverán después de haber disfrutado de un maravilloso verano en familia.

La vuelta a la rutina es un gran cambio después de muchos días en casa, pero es un cambio positivo. Aunque pueda parecer imposible los niños también se cansan de tanto tiempo libre, y agradecerán la vida ordenada que supone el fin de las vacaciones.

Como siempre la anticipación ayudará a tu hija o hijo a comprender el proceso y a prepararse para la vuelta. Los siguientes consejos y cuentos os facilitarán hacer la vuelta al cole más llevadera.

Consejos para la vuelta al cole:

Si es la  primera vez

Si para el niño o la niña es la primera vez que va al colegio, bien por edad o porque cambia de centro educativo, lo mejor será llevarle a visitar la escuela unos días antes de que empiecen las clases. Ahí le podrás explicar con qué se va a encontrar: las aulas, el patio, el gimnasio, el comedor…

Tanto el  primer día de cole como todos los demás es aconsejable un buen desayuno, para evitar que se sienta cansado durante la jornada.

Dejad preparado la noche de antes lo necesario para llevar al día siguiente. Los primeros días es incluso aconsejable poner el despertador media hora antes, ya que es normal en esas jornadas iniciales tardar más en hacer las cosas. Lo que nos interesa es huir de las prisas, no conviene llegar ni corriendo ni tarde.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole
Ilustración de Irina Dobrescu. Todo a punto, mañana empieza el cole.

La (dura) vuelta a la realidad

En los adultos tiene un nombre: síndrome posvacacional, y según un estudio que publicó Adecco afecta a un 30% de los españoles. Desgana, apatía, cansancio, falta de energía… En el caso de los niños aún no se le ha puesto nombre, pero lo cierto es que a todos nos cuesta levantarnos temprano después de un verano sin horarios.

Hay niños a los que les cuesta levantarse y que no quieren volver a clase… La mejor forma de motivarles es explicarles que van a ver de nuevo a sus amigos, que cantarán canciones, que leerán cuentos, que aprenderán, que tienen material escolar nuevo para estrenar… En fin, todo lo bonito que tiene un primer día de clase.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole
Ilustración de Amélie Graux. La hora del patio. Reencontrarse y jugar con los amigos es lo mejor del primer día de clase.

Dejarle llorar ¿sí o no?

Padres con prisas, atascos y niños y niñas desconsolados porque no quieren entrar a clase… Es una escena que se repite cada año.

Intenta no hacer un drama. Si tu hijo o hija se queda llorando explícale que mamá, papá o la persona que sea vendrá luego a recogerlo. Quizás en ese momento pueda sentirse abandonado, pero cuando llegue la hora de la salida verá que es verdad lo que le has dicho. Al día siguiente sabrá que alguien estará esperándole cuando acabe su jornada escolar.

¡Mejor no te quedes mirando por la ventana mientras el niño llora!, es una situación difícil para todos: para el adulto, para el niño y para el profesor o profesora.

Evita la sobreprotección. Que los padres o uno de ellos acompañen a su hijo al cole el primer día de clase hará que el pequeño se sienta más seguro y feliz, pero evita transmitirle tu preocupación en el momento de la despedida.

Un poco de entrenamiento

Es fundamental una vuelta progresiva a los horarios. Una semana antes de que empiecen las clases conviene que los niños se acuesten más temprano y que se levanten más pronto. También que emulen los horarios de comida del colegio. Los días previos preparad juntos lo necesario: los libros y el material escolar, la mochila, la ropa…

Estableced también desde un primer momento unas normas sobre el tiempo que se dedicará a las tareas escolares y sobre el uso de la televisión, Internet y los videojuegos. Son cosas que pueden usarse como premio al esfuerzo y al cumplimento de deberes.

En casa hablad siempre en positivo del colegio, e intentad llevar y recoger a vuestro hijo con una sonrisa. Se trata de transmitirle la cultura del aprendizaje para que no lo perciba como una obligación, sino como algo  positivo en su vida.

Hacedle ver que es positivo cerrar etapas y que las vacaciones son maravillosas porque suponen un premio a todo un trabajo bien hecho, pero que ese trabajo llega de nuevo.

Cuentos para la vuelta al cole 

Un día en el parvulario | A partir de 1 año | 10 páginas | El cuento muestra un día de la vida de Teo en la escuela, enseñando distintas actividades que se desarrollan en el ámbito escolar. Aparecen ilustraciones de niños y niñas en clase y también practicando música, natación, obras de teatro…  ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

A Lulú le gusta el colegio | A partir de 2 años | 24 páginas | Lulú está muy nerviosa porque hoy es su primer día de colegio y no quiere despedirse de mamá. Además, ¿y si no consigue hacer amigos? Pero cuando Lulú decide ser valiente descubre que el colegio puede ser muy divertido. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐  També en català: ‘La Lulú va a l’escola’.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

El pollo Pepe va al colegio | A partir de 2 años | 10 páginas | Un divertido libro con pop-ups. Para el pollo Pepe hoy es el primer día de colegio, pero se ha quedado dormido y esta mañana tiene mucha prisa. ¿Llegará al cole a tiempo? ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Los Dudús van al colegio | A partir de 2 años | 6 páginas | Conejo, Chanchita, Miu y Osito ¡han empezado la escuela! Un fantástico pop-up con tres escenarios diferentes que se abren como un carrusel de 360 grados con la clase, el patio, el comedor, el lavabo, el gimnasio…

Una lectura interactiva que se puede disfrutar una y otra vez. ¡El regalo perfecto para los más pequeños! ⭐▷Ver en Amazon◁⭐ També en català: ‘Els Dudús van a l’escola’.

¿Ya vas al cole? | A partir de 3 años | 36 páginas | Comenzar a ir al colegio es una oportunidad para crecer en todos los sentidos. Victoria, la protagonista de esta historia, se está haciendo mayor y ya tiene 3 años. Acompáñala en su investigación y descubrirás la magia de esta aventura. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Así me siento en la escuela | A partir de 3 años | 16 páginas | En la escuela los niños y niñas experimentarán muchas emociones diferentes, algunas difíciles de entender y gestionar sobre todo al principio.

Este cuento es una gran ayuda para dialogar sobre ellas, para que las vayan entendiendo y para que vayan encontrando sus propios recursos para afrontarlas con éxito. La soledad, la alegría, el miedo, el enfado… todas estas emociones aparecen en este cuento de página duras y fotografías reales. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

El abejoso | A  partir de 3 años | 32 páginas | Norman adora la miel, cosa normal porque es un oso. Para conseguir toda la miel que quiera decide disfrazarse de abeja y asistir al colegio de las abejas haciéndose pasar por una de ellas. Norman descubre que el cole de las abejas es muy divertido y, aunque él es un pelín diferente, se siente ahí como en casa.

El día lo comienzan pintando, después toca clase de zumbidos. Incluso hay clases de vuelo. Norman estaba encantado y se esforzaba mucho por aprender todo lo necesario en el cole de las abejas. Todo va bien hasta que un día las abejas descubren que es un oso y, al darse cuenta, expulsan a Norman del cole. Pero sin él, el colegio ya no es lo que era.

Un divertido cuento que nos habla de integración, de compañerismo y de amistad. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

El monstruo de colores va al cole | A partir de 3 años | 40 páginas | En esta ocasión el Monstruo de Colores se enfrentará a su primer día de colegio. Para empezar, ¡no sabe ni qué es! Está un poquito nervioso.

¡No sufras Monstruo! Allí te esperan muchas aventuras y nuevos amigos. Página a página le acompañaréis en el descubrimiento de las rutinas, espacios y dinámicas de la escuela, y conoceréis a sus compañeros de clase (os puede ser de utilidad esta guía educativa).

¡Seguro que al Monstruo le gusta la experiencia! ⭐▷Ver en Amazon◁⭐  També en català: ‘El monstre de colors va a l’escola’.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

El primer día de cole | A partir de 3 años | 48 páginas | Un texto lleno de humor ideal para compartir con los más pequeños uno de los momentos más importantes de su vida: sus primeros pasos en el colegio.

«Antes iba a la guardería. Pero ahora soy mayor y ya no uso pañales… Por eso voy al cole». León, el protagonista de este entrañable y expresivo álbum ilustrado, nos cuenta en primera persona cómo es su primer día de cole: allí descubrirá un mundo nuevo de la mano de su maestra y sus compañeros. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

El primer día de un colegio | A partir de 3 años | 40 páginas | Aquel verano, cuando terminaron de construir la escuela Frederick Douglass, el edificio comenzó a hacerse muchas preguntas: ¿Cuál será mi destino? ¿Quién vivirá entre mis paredes? ¿Para qué me utilizarán?

A través de sus conversaciones con el conserje y tras observar y escuchar a los niños que pronto empezaron a entrar por sus puertas, descubrió los sentimientos que infundía en los más pequeños: ilusión, terror, diversión… Gracias a ese hervidero de vivencias y relaciones que sintió entre sus cuatro paredes hoy ha aprendido grandes lecciones y reafirmado su verdadera identidad.

El espacio, bautizado con el nombre de un ilustre luchador contra las desigualdades, abre cada día con la misma ilusión de entonces, y el conocimiento de su historia ayuda a nuevos alumnos de todos los colegios del mundo a comprender las miles de cosas irrepetibles que pueden vivirse en su interior. La obra ha sido reconocida con varios  premios. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐ També en català: ‘El primer dia d’una escola’.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Emma no quiere ir al cole ¡Todos a la escuela! | A partir de 3 años | 36 páginas | A Emma no le apetece nada ir al cole, pero todo cambia cuando descubre que su gatito Flus va a la Escuela de Animales durante la noche… Esta es una historia divertida sobre la importancia de superar el miedo a ir al colegio y descubrir que es un lugar agradable, en el que aprender y divertirse. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La escuela de Teo | A partir de 3 años | 10 páginas | Teo está muy contento porque es su primer día de curso y va a reunirse de nuevo con todos sus amigos. Pasando las páginas de este simpático libro los más pequeños podrán conocer todos los detalles del colegio, del aula, a la profesora, el comedor… ¡y por supuesto el patio! ⭐▷Ver en Amazon◁⭐ També en català: ‘L’escola d’en Teo’

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La escuela infantil | A partir de 3 años | 32 páginas | Un libro para primeros lectores en el que se narra todo lo que se hace en la escuela infantil a lo largo del curso. Con bonitas imágenes, precisas y realistas, para comprender mejor el mundo que nos rodea. Y con páginas transparentes para hacer descubrimientos sorprendentes. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La escuela. Mi libro animado | A partir de 3 años | 24 páginas | Un libro interactivo, con solapas y desplegables, que está pensado especialmente para que los niños y niñas más pequeños se familiaricen con el entorno escolar y puedan anticiparse a lo que se van a encontrar allí. Las clases, las actividades, el recreo o el comedor.

Cuando todo es nuevo para reducir la incertidumbre propia de esa etapa puede ser de gran ayuda ir conociendo poco a poco, y en compañía de los padres, todo lo que hay en la escuela. Este libro, con su lenguaje sencillo y alegres ilustraciones, os permitirá hacer juntos un primer recorrido  por el mundo del cole.  ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La paloma tiene que ir al cole | A partir de 3 años | 40 páginas | El divertido y famoso personaje de Mo Willems se enfrenta a una difícil situación: empezar el cole.

Llega un momento muy importante en la vida de la paloma; empezar el cole, pero ella no lo ve nada claro. «¿Qué pasa si no me gusta el cole?», «¿Qué pasa con la comida?», «¿Qué pensarán de mí los otros pájaros?», «¿Qué pasa si hay matemáticas?», «¿Qué pasa si?» Todas las dudas que tiene la paloma te van a resultar muy familiares, ya que todos conocemos la sensación de angustia que acompaña un gran cambio; ir por primera vez al cole, mudarse a un nuevo barrio o cambiar de clase.

Este álbum nos ofrece una visión divertida y empática de este proceso de aceptación de los propios miedos e incertidumbres y cómo superarlos. Se trata de un libro lleno de diversión e ingenio, ideal para trabajar los miedos e incertidumbres de los más pequeños ante situaciones desconocidas.

Este álbum estuvo en la lista de best-sellers más vendidos del ‘New York Times’ durante once semanas seguidas, y el personaje de la paloma fue considerado por el ‘New York Times Book Review’ como una de las contribuciones de esta década al panteón de los grandes personajes de libros ilustrados. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La princesa espacial | A partir de 3 años | 32 páginas | La princesa Sara no quiere ir al cole. Prefiere aprenderse las lecciones… ¡a base de inyecciones! ⭐▷Ver en Amazon◁⭐ També en català: ‘La princesa espacial’.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La vuelta al cole de los animales | A partir de 3 años | 32 páginas | Un álbum ilustrado divertido para desdramatizar y empezar el curso con humor y con ganas.

Vive la vuelta al cole de los animales. A la entrada, los caracoles, tímidos, juegan escondidos. Al pequeño elefante le pesa demasiado la mochila y los cocodrilos no dejan de llorar. ¿Y qué hacen los ratones, los lobos y los osos? ⭐▷Ver en Amazon◁⭐ També en català: ‘La tornada a l’escola dels animals’.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Lléname de besos el bolsillo | A partir de 3 años | 42 páginas | Ratoncito empieza el cole. El mundo adulto ha creado unas falsas expectativas que se rompen en el mismo momento en que Ratoncito pone un pie en la escuela. Y nuestro protagonista… «se hace pequeño».

Los niños son grandes maestros, pero nosotros como adultos, además de aprender de ellos, también debemos acompañarles en su propio aprendizaje. La verdad es que es una tarea complicada, porque ¡es muy difícil ser niño! ⭐▷Ver en Amazon◁⭐ També en català: ‘Omple’m les butxaques de petons’.

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Los tentáculos de Blef. Miedo | A partir de 3 años | 48 páginas | Blef no consigue dormirse. ¿Será que no tiene sueño? ¡Nooooo! Lo que pasa es que mañana es su primer día de colegio. Al día siguiente le cuesta levantarse, no tiene hambre y el corazón le late muy deprisa.

Este cuento es perfecto para conversar sobre los miedos, los nervios, los nuevos compañeros, el nuevo profesor… y para descubrir que todos tenemos miedo y que podemos expresarlo y encontrar una buena manera de gestionarlo.

El cuento nos facilita una herramienta eficaz para deshacernos de nuestros temores: una caja come-miedos. También se incluye al final una guía para padres y educadores. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Mamá ya viene… | A partir de 3 años | 32 páginas | Uno de los principales miedos que suelen tener nuestros hijos al dejarlos en el colegio es si papá o mamá van a volver o no a por ellos. Las sobredimensionadas ilustraciones de Laure Monloubou y un texto fiel a la lógica y psicología infantil constituyen la combinación perfecta para abordar con sensibilidad y humor esa cuestión.

La mamá de Lisa es una auténtica despistada. Continuamente se olvida de algo, ya sean las gafas, las llaves, el monedero o el asado en el horno. A veces Lisa le ayuda a encontrar lo que ha perdido. Eso puede parecer divertido, pero cuando llega el día de empezar con la escuela, a Lisa le entra miedo de que su madre se olvide de venir a buscarla. Y esa angustia se hace cada día más grande, hasta el punto de que ya no puede disfrutar ni de su cuento favorito. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Nacho va al colegio | A partir de 3 años | 28 páginas | El primer día de clase es una experiencia a la que se enfrentan tanto los niños como sus padres. Liesbet Slegers nos narra este suceso en la vida de Nacho y lo acompaña con unas fantásticas ilustraciones.

El grosor de sus páginas y sus esquinas redondeadas lo hacen ideal para que lo manejen los más pequeños de la casa. Además, el texto en letra mayúscula facilitará la lectura. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

No quiero separarme de mamá | A partir de 3 años | 24 páginas | Ir al cole puede ser divertido, pero no resulta nada fácil separarse de mamá. A David, el niño protagonista de este tierno cuento, no le gusta estar sin su mamá. Para que se tranquilice, ella le contará un gran secreto que ayudará a muchos niños y niñas (y a sus papás y mamás) a afrontar el miedo a la separación. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Olivia no quiere ir al colegio | A partir de 3 años | 24 páginas | Este cuento narra la historia de una niña que, gracias a su abuela, descubre que en realidad ir al colegio es un privilegio que no todo el mundo, en todas las épocas, ha podido disfrutar.

A Olivia le gusta estar en casa con su abuela y acompañarla en sus quehaceres. Tanto es así que, el día que la pequeña tiene que ir al colegio, su abuela la tiene que llevar a rastras hasta la puerta de la escuela.

Por el camino la mujer le cuenta una historia que lo cambia todo. Le explica que, cuando ella era una niña, no pudo ir al colegio durante mucho tiempo y que echaba de menos aprender a leer, poder dibujar y estar con otros niños como si podía hacer Olivia. Cuando llegan a la puerta del colegio a la niña se le ha olvidado su rabieta.

Más tarde, mientras colorea en clase, piensa que por la tarde le llevará los lápices a su abuela para que ella también pueda dibujar. Una lectura sencilla, en letra caligráfica, perfecta para los niños y niñas que están empezando a leer. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Siempre pienso en ti | A partir de 3 años | 40 páginas | A mamá se le encoge el corazón cuando deja a su hijo en la escuela. Sin embargo, su pensamiento no se aparta ni un momento de él y todo el día su amor les hace compañía. Pero lo que más le gusta del día, lo que de verdad le hace feliz, es irlo a buscar y abrazarle muy fuerte… ¡Hasta mañana no me separo de ti! ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Teo en la escuela | A partir de 3 años | 32 páginas | Teo y su hermano Pablo llegan al colegio el primer día de clase. Los dos tienen ganas de encontrar a sus amigos y aprender muchas cosas nuevas. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐ També en català: ‘En Teo va a l’escola’

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Un beso en mi mano | A partir de 3 años | Para Chester, un pequeño mapache, ha llegado el momento de ir a la escuela. Chester se siente triste, no quiere separarse cada mañana de su mamá y dejar de hacer las cosas que le divierten.  Quiere quedarse a jugar con sus amigos, leer libros y columpiarse en su columpio.

Su mamá comprende cómo se siente, porque sabe que hay situaciones nuevas que pueden resultar extrañas o asustar. Pero ella también sabe que su hijito muy pronto hará nuevos amigos y descubrirá nuevos libros y nuevos juguetes, y nuevos columpios que le encantarán.

La mamá de Chester tiene una solución tierna e imaginativa  para que el pequeño no se sienta solo ni triste durante las horas que pasa en el colegio.

Este libro, que se ha convertido en todo un clásico de la literatura infantil, transmite un mensaje que tranquiliza: con el amor incondicional de nuestra familia siempre podemos contar y, con esta seguridad, podemos enfrentarnos a cualquier reto. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Un gato en el colegio | A partir de 3 años | 40 páginas | Un día el conserje de la escuela encuentra en el patio un gatito y lo lleva a la clase de infantil. Para el gatito el colegio será su nuevo hogar a partir de ese momento. Un cuento rimado, muy gracioso y tierno, para hablar del colegio y de sus costumbres y rutinas de una forma entretenida y diferente. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

¡No quiero ir al cole! (Simón) | A partir de 4 años 32 páginas | Este libro pertenece a la serie «Simón». Simón es un pequeño conejo blanco que transmite toda la vitalidad de la infancia: es adorable, tiene mucha energía, le encanta hacer travesuras ¡y es muy muy divertido! Stephanie Blake nos trae sus aventuras acompañadas de alegres y divertidas ilustraciones.

En este título de la colección Simón tiene que empezar el colegio, idea que no le resulta nada atractiva. Esa noche no puede dormir, y a la mañana siguiente apenas puede probar bocado. Pero para su sorpresa en el colegio suceden mil cosas, ¡todas ellas muy divertidas! ¡Ahora ya no quiere volver a casa! ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La escuela desplegable | A partir de 4 años | 8 páginas | Un libro desplegable para jugar que se transforma en una divertida escuela tridimensional, con un montón de objetos para buscar en cada página. En cada sección del libro, los niños podrán ir descubriendo las diferentes partes de una escuela: el aula, el patio, el comedor… En cada página, se puede jugar al juego de memoria, buscando las imágenes que aparecen al reverso. Cada sector tiene dos variantes, según cómo se acomoden las páginas. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

La escuela Sabana (Julia & Paco) | A partir de 4 años | 32 páginas | Julia, la jirafa, y Paco, el puercoespín, son grandes amigos. Ella es altísima y muy tímida. Él tiene púas y es un pelín cascarrabias.

A la escuela Sabana van animales de muchos tipos y todos dicen siempre al entrar: «¡Buenos días por la mañana!», bueno, todos no. La jirafa Julia tiene una lengua muy larga y se hace un lío con las palabras. Ella dice: «¿Es día sandía o día banana?». Todos se ríen de ella. Todos menos Paco, que siempre la defiende y trata de animarla. Pero, ¿qué es un «día sandía»? ¿Y un «día banana»? Descúbrelo. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Mamá va al cole | A partir de 4 años | 32 páginas | Es el primer día de cole. Todos los niños y niñas se despiden de sus padres entre lloros y rabietas en la puerta del colegio. Pero la pequeña protagonista de esta historia no se da por vencida y consigue que su madre se quede con ella. Aunque nada saldrá como espera. Un libro lleno de ternura y diversión. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

¿Tengo que ir a escuela? | A partir de 5 años | 32 páginas | Este libro ayuda a los niños a comprender que la escuela es un espacio donde empiezan a aprender cosas nuevas sobre el mundo más allá de la familia. Los niños descubrirán el placer de aprender cosas nuevas, conocer personas nuevas y vivir nuevas experiencias. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Los secretos del cole | A partir de 5-6 años | 32 páginas | Este divertido cuento es perfecto para ponerle un poco de humor a la vuelta al cole de los niños y niñas un poco más grandes. Leedlo juntos, aunque tu hijo o hija ya sepa leer solo, porque pasaréis un rato entretenido y será una bonita forma de retomar la rutina de las clases con humor.

Un libro infantil que retrata los entresijos de la escuela y sus habitantes: ¿Adónde van las profes cuando se pone el sol? ¿Por qué las directoras siempre patrullan por el pasillo? ¿De dónde vienen las sustitutas? Y los niños nuevos, ¿dónde se van a sentar? ¿Cómo consiguen las cocineras hacer comida para tantos niños? ¿Y por qué casi nunca nos dan patatas fritas? ¿Qué misterios esconden las excursiones escolares? Y las faltas de ortografía, ¿para qué sirven? Encontraréis respuesta a todas estas preguntas y a muchas otras. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Mi primer día de colegio | A partir de 5 años | 32 páginas | Hoy es el primer día de colegio de Teo. ¿Quieres acompañarlo? Si lees este libro podrás descubrir cómo se lo ha pasado y todo lo que ha aprendido.

Este libro pertenece a la colección ‘¡Soy Teo!’, pensada especialmente para los niños que empiezan a leer. Los textos breves que acompañan las ilustraciones, así como el tipo de letra utilizada –mayúscula y caligráfica-, los ayudan a iniciarse en tan importante hábito. Las palabras seleccionadas y extraídas de las frases y los dibujos que las acompañan permiten al lector centrar su atención en ellas e incorporarlas a su vocabulario. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

El camino a la escuela | A partir de 7 años | 32 páginas | Hay días en que ir a la escuela no apetece nada. En esos días es bueno recordar que no todos los niños en el mundo tienen la suerte de poder ir al colegio. Algunos incluso tienen que trabajar para ayudar a sus familias.

Este libro muestra distintas realidades de niños de todo el planeta con hermosas fotografías. Vemos que hay niños que para llegar a su escuela necesitan cruzar todos los días un río a pie, otros que van montados en un buey y se lo tienen que tomar con calma y otros que tienen que llevar su pupitre a cuestas cada día. Lo que importa es llegar a la escuela.

Son fotografías impactantes que nos invitan a la reflexión y nos recuerdan la suerte de poder ir al colegio cada día para aprender, compartir y vivir. Cada imagen de este hermoso libro fotográfico para jóvenes lectores habla de la importancia de la educación y del compromiso físico que los niños están dispuestos a realizar cada día para conseguirla. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

El gran libro de la escuela | A partir de 7 años | 72 páginas | Este libro de Richard Scarry se editó por primera vez en 1975. El pequeño lector acompaña a los emblemáticos personajes en esta aventura de ir al colegio.

Con muchos detalles en las ilustraciones, se descubre todo un mundo: qué hacer antes de salir, cómo llegar a la escuela, qué hay en el aula. En el colegio se aprenden muchísimas cosas y con este libro se hace un buen repaso de ellas: los días de la semana, las horas, las medidas, las letras y mucho más. La señorita Tarro de Miel y sus alumnos son los encargados de hacer este viaje. ⭐▷Ver en Amazon◁⭐

Consejos y cuentos para la vuelta al cole

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

¡Vacaciones! ¡Me ABURRO! ¡Vamos a JUGAR! Recetas para jugar en familia. Juegos de verano para niños, para cuando estemos en casa, en el coche, en la playa, en la montaña, si se hace de noche…

Juegos de verano para niños:

💒 Estamos en casa

Fabricamos un juego de mesa | El primero de los juegos de verano que proponemos se llama KARUTA y es un juego japonés. Para hacer las cartas necesitaréis algunas cajas de cereales. La versión fácil es hacerlo con parejas de cosas: pueden ser refranes populares, personajes de cuento: Caperucita y el lobo, la princesa y el guisante, Hansel y Gretel… en una tarjeta ponemos a un miembro de la pareja y en otra tarjeta al otro.

Vamos haciendo hasta tener una pila de 40 cartas, 20 parejas. Se separan los dos tipos de cartas. Uno de los miembros de cada pareja se coloca boca arriba sobre la mesa o el suelo: el lobo, el guisante, Gretel…  el resto de cartas lo tenemos en la mano.

Se gira una carta de las que estamos sujetando: Caperucita. El primero que encuentra la pareja (entre las que hemos dejado sobre la mesa o el suelo) la tapa con la mano, o la golpea, y coge la carta.

Juegos de verano para niños

7 juegos de papel y lápiz para imprimir y jugar | Nuestros hijos e hijas tienen tendencia a coger el móvil, jugar con las videoconsolas, las tabletas, el ordenador… Desconectar un rato es beneficioso para todos.

Para enriquecer su abanico de juegos, puedes enseñarles alguno de estos que seguramente no conocen y que les permitirán disfrutar de un rato agradable sin necesidad de pantallas. Clica en la imagen para descargar en PDF, imprimir y jugar:

Juegos de verano para niños

🚗 Vamos en coche. Juegos de viaje para niños

Consejos para jugar en el coche con seguridad

Desplazarse con niños por carretera durante el verano puede convertirse en todo un suplicio. Además de armarse de paciencia, conviene planificar diferentes formas para que los niños se diviertan y estén entretenidos y distraídos durante el viaje.

Mantener ocupados a los pequeños y planificar paradas periódicas para estirar las piernas y quemar energías será beneficioso para ellos y evitará que se impacienten y se pongan de mal humor. Todos estaréis mucho más relajados al llegar a vuestro destino.

Juegos de verano para niños

Por descontado, en la mayoría de los juegos con niños en el coche el conductor del vehículo no puede participar. Es aconsejable que sea otro adulto el responsable de dirigir el juego y mantener el orden, para evitar posibles distracciones de la persona que está al volante. También es preciso aleccionar a los niños y enseñarles que hay que mantenerse tranquilos en el coche mientras juegan, para no alterar al conductor del vehículo.

Para tramos más difíciles o cuando se quiere mantener la calma en el automóvil durante un rato, se puede recurrir a los cuentos. El copiloto puede leer a los más pequeños sus historias favoritas o también se puede optar por un CD de historias narradas.

Vestir a los niños con ropa cómoda, llevar un tentempié por si les entra un poco de hambre, no olvidar las bebidas y parar para descansar con relativa frecuencia son algunas de las pautas que deben seguir las familias para lograr que los pequeños tengan un viaje agradable y tranquilo.

Viajar no es sólo llegar, también es ir. Es por ello importante hacer todo lo que esté en nuestras manos para que el viaje por carretera sea lo más seguro, cómodo y divertido para nuestros hijos e hijas. Te sugiero que eches un vistazo a estos 9 accesorios, te facilitarán el viajar en coche con niños durante el verano:

Espejo ajustable para el reposacabezas | Este accesorio, muy fácil de instalar, es ideal para vigilar a tu bebé cuando va en una silla a contramarcha:

Juegos de verano para niños

Houdini Stop | Arnés de sujeción pensado para los escapistas de la casa. No interfiere ni impide el correcto funcionamiento de la silla y sirve para prevenir que los niños saquen los brazos del arnés de la silla. Es útil también para sillitas de paseo o tronas:

Juegos de verano para niños

Asiento elevador de coche | Este alzador inflable está homologado por la UE para niños de entre 15 y 36 kg de peso. Se infla en 30 segundos y pesa muy poco, e incluye una funda lavable y una bolsita de tela para transportarlo cuando está deshinchado. Te será muy útil en trayectos de vacaciones y en coches de alquiler:

Juegos de verano para niños

Sujetacabezas adaptable | Con él evitarás que durante las siestas la cabeza de los niños se balancee de lado a lado, gracias a la cinta que sujeta la cabeza por la frente y a los dos apoyos que van a ambos lados del dispositivo. Este artículo se adapta a todas las sillas de coche a favor de la marcha, y no altera el comportamiento del sistema de retención infantil en caso de accidente.

Juegos de verano para niñosProtector de cinturón | Los divertidos diseños de este protector de cinturón + reposacabezas están pensados para bebés hasta los 12 meses. Evitan los roces del cinturón en la delicada piel del bebé:

Juegos de verano para niños

Parasol para ventanilla lateral | Con este artículo se acabó eso de que el parasol se despegue a cada momento por culpa de las ventosas. Se adapta a la ventanilla del coche como una funda, pero con la posibilidad de bajar la ventana. Está realizado con tejido transpirable, por lo que permite el paso del aire mientras protege del sol, y funciona también como cristal tintado. Es compatible con la mayoría de modelos de coche, excepto con aquellos que tienen ventanas alargadas:

Juegos de verano para niños

Organizador para asiento | Este organizador impermeable para asiento delantero tiene 6 compartimentos separados que proporcionan un rápido acceso a la tablet, bebidas, toallitas o cualquier otra cosa que necesiten los niños durante el viaje. Es resistente al agua y muy fácil de limpiar,  y protege la tapicería del coche contra derrames y manchas de líquido:

Juegos de verano para niños

Bandeja multifuncional | Si no quieres que la tablet sea la única solución para entretener a tu hijo o hija durante el trayecto, esta bandeja es una estupenda alternativa. Una mesilla multifuncional que ofrece infinidad de posibilidades, en ella se puede tanto jugar como comer y beber. Es de fácil instalación y se adapta a cualquier silla de automóvil (también es apta para tronas y carritos de paseo):

Juegos de verano para niños

Cambiador portátil | Gracias a este cambiador portátil impermeable podrás cambiar a tu bebé en cualquier parte y llevar dentro de él todo lo que sea necesario para ello. Es práctico y duradero, y se puede limpiar con facilidad. Además, se pliega en una cómoda bolsita con bolsillo exterior:

Juegos de verano para niños

Juegos de coches para niños

Hacer carreras de escuderías | «¿Tú que marca quieres? Yo quiero Renault, yo quiero Ford…» Cada jugador escoge una marca. Cuando un jugador ve un coche de su marca lo dice: «un Renault, es mío», ya tiene un punto. Gana el primero que llegue a diez.

Contar coches | Consiste en establecer un parámetro para contar coches: por colores, por marcas o  por modelos, por ejemplo. Además de los coches se puede contar cualquier otro elemento del paisaje que apetezca.

Juegos de verano para niños

Juegos de letras y palabras

Cambiando una letra | Pueden jugar dos, tres… y han de ser jugadores que comiencen a tener algo de lenguaje. Uno de los participantes dice un monosílabo formado por tres letras, por ejemplo: MAR.

El resto de jugadores piensa y, al primero que se le ocurra otro monosílabo, cambiando solo una letra, lo dice en voz alta: MAR → MAL → MAS → VAS →VES →MES…

Haciendo el equipaje | Un juego que desarrolla la creatividad, indicado para niños a partir de 4 años. La persona adulta dirá: «¿qué llevamos en la maleta?». El niño irá diciendo todos los objetos que se le ocurran y que rimen con maleta, por ejemplo «una raqueta, una piruleta, una paleta…». Después se puede preguntar qué llevamos en la mochila o en el equipaje.

Juegos de verano para niños

La lista de la compra | Un juego para mejorar la memoria de niños a partir de 4 años. Empiezas diciendo por ejemplo: «fui al mercado y compré huevos». Cada jugador deberá ir añadiendo un producto, mencionando todos los que se han dicho en las rondas anteriores: «fui al mercado y compré huevos, sal, leche, pan, aceite…» ¡La lista puede ser interminable!

Juegos de verano para niños

Asociación de ideas | Para jugar partimos de una palabra y después pensamos en otras que vienen a la mente relacionadas con la palabra. Por ejemplo, pensamos en «colegio», y pueden ser palabras relacionadas: alumno, pupitre, pizarra, clase, asignatura, profesor, notas, evaluaciones…

La palabra encadenada | Con niños de más de seis años podemos intentar que asocien palabras que acaben y empiecen por la misma sílaba. Si tú dices «casa», tendrán que decir una palabra que comience por «sa», por ejemplo «saludo»; el siguiente dirá una palabra que empiece por «do» como «dorado», y así sucesivamente. Pierde el que repita una palabra.

Juegos de verano para niños

La frase más larga | Uno dice una palabra. El siguiente repite esa palabra y añade otra. El tercero repite las anteriores y añade otra más. Y así hasta que se forme una frase con elementos del paisaje. Hay que ser rápido en añadir palabras, así cada frase que surja será de lo más disparatada. Para niños y niñas a partir de 8 años.

Caza de letras | Un juego al que podrán jugar incluso los niños que están aprendiendo el abecedario. Se empieza con la letra «A», que hay que buscar en una señal, camión, edificio, matrícula… El primero que llegue a la «Z» es el ganador. Se puede jugar como una competición (todos contra todos) o juntos toda la familia.

La búsqueda de la letra | Para empezar el juego es suficiente con pensar en una letra del abecedario. Todos los jugadores intentarán encontrar en el entorno, bien sea dentro o fuera del coche, objetos que empiecen por esa letra, en un periodo de tiempo que determinemos. Pasados unos minutos el que más palabras haya dicho con la letra elegida gana la ronda.

Juegos de verano para niños

Juegos de números

Cifras y letras | En las matrículas de los coches se esconden un sinfín de juegos. Pídele al niño que diga una palabra que incluya las letras de la matrícula del coche que va delante, o una frase en la que cada palabra empiece por una de las letras. Por ejemplo, si la matrícula es APS podría decir «apuesta» o «amor para siempre». Con los números puedes pedirle que vaya sumando y restando sus cifras, para así repasar algo de matemáticas.

Juegos de verano para niños

Par o impar | Para los más peques un juego sencillo. Deben estar atentos a las matrículas y mirar el último número. Uno busca los números pares y otro los impares. Cada jugador lleva su propio marcador y el ganador es el primero que alcanza los 21 puntos.

Jugar a multiplicar | Este es un juego divertido para niños más mayores. «Esta mañana me he comido 1 bollo», dice un jugador. A lo que el segundo contesta: «pues yo me he comido 10». Así se debe continuar (20; 30; 40; etc.) con diferentes acciones, multiplicando lo que el primer jugador ha dicho por 10.

A sumar | Para los que ya saben sumar. El reto consistirá en organizar una competición en la que los participantes tienen que sumar todos los números de la matrícula del vehículo que indique el director del juego. El que consiga más aciertos y sea el más rápido en averiguar el resultado será el ganador.

Se puede añadir dificultad a este juego añadiendo otras operaciones con la numeración, como restas o multiplicaciones.

Juegos de verano para niños

Juego de las matrículas adaptado a los más pequeños | Para los niños más pequeños que aún no sepan operar con los números, se puede optar por una versión más simple consistente en leer de forma correcta los números de la matrícula.

Otra posibilidad, para entrenar la memoria, es asignar a cada número (del 0 al 9) un color. Los participantes tienen que ser capaces de leer la matrícula traducida a los colores correspondientes.

Juegos de canciones

El juego de las canciones | Uno de los ocupantes del coche dice una palabra, por ejemplo «amor» o «flor» o «calor»… el resto deberá ir cantando por turnos canciones que contengan la palabra mencionada. En el caso de niños muy pequeños se puede ampliar el repertorio con melodías que hablen de animales o que tengan nombres propios.

Juegos de verano para niños

Recordando canciones | ¿Recuerdas las canciones que tú cantabas cuando ibas de vacaciones? ‘El auto de papá’ de los payasos de la tele, ‘Vamos a contar mentiras’, ‘La vaca lechera’, ‘Un elefante se balanceaba’ o la divertida historia de la sardina y el gato que se apostaron la manera de meterse en un zapato. Si no os apetece cantar, buscad un disco con canciones infantiles y deleitaros con un concierto sobre ruedas.

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Continuar la canción | Pon canciones que los niños conozcan bien y jugad a pararlas nada más empezar, para que adivinen de cuál se trata, o a bajar el volumen sin avisar y que ellos tengan que continuar cantando (pierde el que no sepa seguir).

Ver una película

Siempre es una buena opción instalar un DVD portátil. Una película dura más de una hora, en la que los niños estarán entretenidos. En el apartado de películas de este blog encontrarás una amplia selección.

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Trabalenguas fáciles para niños

Los trabalenguas nos hacen reír. Además dan a los niños y niñas soltura en el dominio del lenguaje potenciando la memoria, ayudando a vocalizar mejor y ampliando el vocabulario. ¡Qué más quieres! Clica en la imagen para acceder a este PDF con 60 trabalenguas de diferentes niveles de dificultad:

Juegos de verano para niños

Chistes para niños

Reír es uno de los mejores ejercicios de relajación. Es también un buen remedio para enfrentar los conflictos, limar asperezas y combatir el aburrimiento y el cansancio. Además, está demostrado que tiene un efecto analgésico a la vez que fortalece el sistema inmunitario.

Los chistes pueden ser una gran opción para despertar la risa en los más pequeños. A partir de los 6 años, al empezar primaria, es normal que aprendan algunos chistes en libros y con sus compañeros.

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Acertijos y adivinanzas fáciles para niños

Las adivinanzas son un pasatiempo estimulante y divertido. Ayudan a los niños y niñas a estimular la lógica y la concentración al plantearles problemas de forma original.

Desde las adivinanzas más simples como el «oro parece, plata no es» hasta verdaderos enigmas para la inteligencia, las adivinanzas son el juego ancestral por excelencia. Resultan ideales para hacer pasar el tiempo ya que cuanto más elaboradas sean, más minutos tardan en resolverse, aunque un exceso de dificultad puede convertir el pasatiempo en una experiencia frustrante que motivará que el niño abandone el juego.⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀

Las adivinanzas de animales que encontrarás en este PDF, por su dinamismo y sencillez, las podrán resolver los más pequeños sin dificultad:

Juegos de verano para niños

O puedes hacerte con alguno de estos libros:

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Juegos de verano para niños

Otros juegos

Ni sí, ni no | Un juego muy divertido de preguntas en el que está prohibido responder «sí» y «no». El primero que lo haga, pierde.

Veo, veo | Todo un clásico para los viajes en coche. Si quieres aportarle un toque educativo, haz que el niño averigüe palabras sobre las que luego puedas explicarle algo. Recuerda la cancioncilla:

Veo, veo.
¿Qué ves?
Una cosita.
¿Y qué cosita es?
Empieza por la (letra).
¿Qué será, qué será, qué será?

Su propio mapa | Dales a los niños un mapa con el itinerario que vais a recorrer. Muéstrale o márcale vuestro destino, así como el punto de partida. De este modo cada vez que pregunten «¿Cuánto falta?» podrás enseñárselo en el plano, mientras se hacen una idea de lo que habéis recorrido y lo que queda.

Una opción barata y más sencilla es imprimir un mapa con el recorrido de Google Maps. Incluye gasolineras, puntos de interés, nombres de pueblos, ciudades, etc. Así los niños podrán entretenerse marcando los hitos según vayan llegando.

Haciendo rimas | Uno pregunta: «¿Qué metemos en la nevera?» Y todos van contestando por turnos cosas que rimen, por ejemplo: «dos kilos de peras». Cuando ya no se les ocurra nada más o menos coherente, se formula de nuevo la pregunta cambiando el recipiente. A partir de 7 años.

Te voy a contar un cuento | Una forma estupenda de enseñar a niños a partir de 4 años a inventar un cuento. Un adulto da las claves: objetos, personajes, lugares… A partir de esos datos los niños deberán crear una historia organizada que contenga todos los elementos que se les han dado.

Carrera de gotas | Un juego ideal para viajes en días de lluvia, para niños a partir de 4 años. Cada jugador «apadrina» una de las gotas de agua que quedan pegadas al cristal y se van escurriendo. La gota más rápida hará ganar a su padrino. Conviene marcar el punto de salida y la meta.

Veinte preguntas | Piensa en una persona, animal, lugar o cosa. Los otros tienen que adivinar la respuesta en un máximo de 20 preguntas, a las que hay que responder con un «sí», «no» o «a veces».

La bolsa del tesoro | Di a los niños que tienes una bolsa mágica en la que hay algo o alguien escondido. Ellos deben ir haciéndote preguntas para adivinar de qué se trata. Con niños más mayores tú solo podrás responder «sí» o «no». Si son más pequeños puedes dar respuestas más largas que les aporten alguna pista.

Buscando formas | Elige una forma cualquiera y di a los niños que tienen que buscarla en el paisaje o dentro del coche. Para un triángulo vale por ejemplo el tejado de una casa, una señal de tráfico, un símbolo en el salpicadero… Para un rectángulo, el retrovisor, una fábrica… Y para un círculo serviría la luna, el volante…

¿Qué vendo en mi tienda? | Cuando los niños no lo conocen este es un juego muy divertido. Explícales que todos en el coche tenéis una tienda, pero que cada uno de vosotros solo puede vender ciertas cosas. Ellos tienen que adivinar qué es lo que venden.

La clave está en que cada persona solamente puede vender cosas que empiecen por la inicial de su nombre: si el niño se llama Carlos venderá cuadernos, casas, colgantes… Y si la niña se llama María, en su tienda habrá marcos, maracas o mochilas. Ellos deben preguntar: «¿Vendo libros?» Y tú contestar: «No, pero sí vendes….»

¿Falta mucho? | Esta actividad se prepara con los niños antes de comenzar el viaje, y sirve para que ellos puedan visualizar cuánto queda de camino. Antes de iniciar el trayecto los niños pintan diferentes objetos o lugares que os vais a encontrar en el camino, y colocáis estos dibujos en una cuerda dentro del coche. Cuando paséis por uno de los lugares, se quita el dibujo correspondiente. Cada vez irán quedando menos dibujos.

A ver quién ve antes… | Este es un juego que potencia la atención y evita mareos. A ver quién ve antes una casa blanca, un coche verde, un árbol muy alto… El primero que vea lo que habéis dicho consigue 10 puntos. Gana el que antes llegue a 100.

El animal más raro | Un juego para estimular la imaginación de los niños. Consiste en inventar animales raros uniendo características de varios. Por ejemplo, «un elefante verde con orejas de perro y bigote de gato».

Juegos de verano para niños

Carrusel de cuentos | El primero piensa un título para un cuento. Basándose en el título, la siguiente persona comienza con la primera frase del cuento: «Érase una vez…». Un tercero continúa con la siguiente frase del cuento y así sucesivamente.

La casa de San Juan | Alguien robó pan en la casa de San Juan y como nadie sabe quién ha sido, todos van acusándose unos a otros mientras cantan:

Todos: «Pedro robó pan en la casa de San Juan.»
Pedro: «¿Quién yo?»
Todos: «Sí, tú.»
Pedro: «Yo no fui.»
Todos: «¿Entonces quién?»
Pedro: «María.»
Todos: «María robó pan en la casa de San Juan…»

Este juego es especialmente divertido en el autobús, ya que es mayor el número de participantes. A partir de 5 años.

⛱ Estamos en la playa

Hacemos una pila de arena | En la parte de arriba de esa montaña clavamos algo que tengamos o que hayamos encontrado: puede ser una concha, un palo de helado… Cada jugador, por turnos, saca un poquito de arena de la pila. Al que cuando quite tierra se le caiga el palo del helado, la concha, o lo que se hubiese colocado arriba, le toca ir luego a buscar los helados.

Juegos de verano para niños

Hacemos un superchurro de arena | Dentro escondemos un pequeño palo. Cada jugador junta sus dos manos, uniendo los dedos y poniéndolas planas, con las palmas hacia abajo. Con las manos en esa posición chafa un trozo del superchurro, con la intención de encontrar el palo escondido. El que chafe y encuentre el palo ha ganado.

Castillos de barro y de arena | A los más pequeños les fascina modelar o usar moldes para hacer figuras en la arena, pueden disfrutar llenándose de barro hasta enterrarse sin recibir una regañina. A partir de 3 años.

Juegos de verano para niños

Juego de la rayuela en la orilla | Aprovechando la parte húmeda de la arena, cuando es amplia, dibujar una rayuela con forma espiral que tenga diez casillas y un centro con la palabra «cielo». Se tira una piedra y se salta a la pata coja, sin pisar la casilla en la que ha caído la piedra. A la vuelta se recoge y salta el siguiente. Cada vez se tira a una casilla más próxima al centro y, si por error, la piedra cae en él, habrá que empezar de nuevo. Gana el que llegue antes al «cielo». A partir de 6 años.

Juegos de verano para niños

Reto personal | Este es un juego individual que se prepara dibujando en la arena una fila con ocho casillas. Pon tres guijarros blancos en las tres primeras casillas y tres guijarros negros en las tres últimas. El reto consiste en llevar todas las piedras al extremo opuesto. Para ello, las fichas se mueven de una en una hacia delante y saltándose unas a otras, pero sin posibilidad de retroceder. Un rompecabezas para los más persistentes. A partir de 8 años.

🌲 Si nos va más la montaña. Juegos en el campo y la montaña

Juegos de verano para niños

El juego de las piedras | Es de aquellos juegos que vayas donde vayas del mundo encontrarás a gente que juega de una manera u otra. Tiras cinco piedras pequeñitas al suelo. Se coge una de esas piedras y se lanza al aire. Mientras la piedra esta en el aire, con la misma mano que se ha lanzado se ha de recoger una de las del suelo, y luego recoger la piedra que está volando. Así hasta que se han cogido todas. Si no da tiempo a coger la piedra que está en el aire y cae al suelo, pasa el turno al siguiente jugador.

Romper el hilo | Un niño debe perseguir a otro como si lo uniera a él un hilo imaginario. Cuando otro compañero se cruza es como si cortase el hilo, por lo que el perseguidor deberá seguir al niño que se le ha cruzado. Si el niño perseguidor pilla al perseguido, éste es el nuevo perseguidor. Los que huyen tienen la posibilidad de salvarse unos a otros arriesgándose a cruzarse en plena carrera. A partir de 8 años.

El escondite | Un clásico siempre divertido. Un niño cuenta hasta veinte de espaldas en un árbol que se ha establecido como «CASA». Los demás se esconden y él tendrá que buscarlos. Cuando ve a uno, debe correr a la «CASA» a decir su nombre y su escondite.

Los escondidos deben aprovechar los paseos del niño que para, y en ese momento correr a la «CASA» y salvarse. Los que se salvan gritan «¡por mí!» y el último debe salvar al resto diciendo: «por mí y por todos mis compañeros». En tal caso el que paraba volverá a parar, de lo contrario parará el que haya sido descubierto el primero. A partir de 5 años.

Carrera de aguadores | Los niños cogen un recipiente de plástico lleno de agua y comienzan una carrera en la que tú les vas diciendo lo que deben hacer. Les indicarás hacia qué árbol han de dirigirse, si deben hacerlo a pata coja o de espaldas o dando vueltas sobre ellos mismos, así como subir a una roca o saltar desde ella. Al finalizar el juego, gana el que más agua conserve en el recipiente. A partir de 4 años.

Alto | Un niño persigue al resto de los compañeros, si consigue tocar a alguien el niño tocado se convierte en perseguidor. La única forma de salvarse del perseguidor es subirse a algo: una roca, un árbol… A partir de 6 años.

Piedra, papel o tijera | Los jugadores tienen la palma de la mano hacia arriba y el puño sobre ella. Mientras cuentan hasta tres golpean la palma con el puño. Al llegar a tres, convierten el puño en el objeto de su elección. Hay tres para escoger:

  • piedra (puño cerrado),
  • papel (mano abierta)
  • o tijera (dos dedos en forma de V)

La piedra gana porque rompe la tijera, el papel gana porque cubre la piedra y las tijeras ganan porque cortan el papel. Si se saca la misma forma, la jugada se repite.

Juegos de verano para niños

🌜 Y si se ha hecho de noche

Un juego de noche, para jugar en casa con un nombre curioso: «Tú, gato, come caca«. Es una especie de juego de los disparates evolucionado.

Cada participante coge una hoja de papel y lápiz. Cada jugador ha de pensar una frase y escribirla en la parte superior de la hoja. A la de tres le pasa esa hoja al jugador que tiene a su derecha, que mira lo que hay escrito, lo representa con un dibujo y dobla la parte superior de la hoja, de manera que no se pueda ver la frase original que ha inspirado la ilustración.

De nuevo cada uno pasa la hoja al jugador que esté a la derecha, que en esta ocasión ha de interpretar el dibujo con una buena frase.

La rueda continua, de forma que se alterna que cada jugador escriba una frase o haga un dibujo. Hay que tener en cuenta que cuando se hace un dibujo se ha de esconder la frase que lo ha inspirado.

Cuando la hoja ha pasado por todas las manos se despliega, y se ríe un rato al ver la forma en que ha degenerado el concepto original. Es probable que el curioso nombre del juego tenga su origen en alguna de estas degeneraciones.

En realidad se trata del típico juego del teléfono, al que todos hemos jugado alguna vez, pero con un tunning de dibujo. Ideal para aquellos que tienen ganas de reír pero que ya han soplado unas cuantas velas y a los que el juego del teléfono les parece un poco ridículo. (Para este juego, en vez de hojas de papel, también se pueden usar tarjetas. Un jugador escribe por una cara, el siguiente hace el dibujo en el reverso, el tercero coge una nueva tarjeta…)

Juegos de verano para niños

Imagen de portada: flickr Sergio Aguirre | Este artículo se ha incluido en el blog de Twinkl – ¿Tú también has sobrevivido al curso escolar 2020 – 2021? – como parte de su campaña de fin del curso escolar 2020 – 2021

Cómo mejorar la coordinación ojo-mano

La coordinación ojo-mano es la habilidad que nos permite llevar a cabo actividades en las que de manera simultánea utilizamos los ojos y las manos: integramos la información que nuestros ojos nos facilitan (percepción visual del espacio) para guiar el movimiento de nuestras manos. Comprar puzzles u otros juguetes que ayuden al desarrollo de esta capacidad en tu hijo/a es todo un acierto.

Esta destreza se conoce también como coordinación óculo-motora, óculo manual, o visomotriz, y casi todas las actividades de nuestra vida cotidiana requieren de ella: escribir en un papel o en el ordenador, conducir, practicar deportes, introducir la llave en la cerradura…

Dónde comprar puzzles online para niños

La coordinación ojo-mano es una habilidad cognitiva compleja. Empieza de manera natural desde una edad muy temprana, y va evolucionando a medida que el bebé aprende a fijar la vista, a seguir un objeto con la mirada, a coger de forma voluntaria aquello que ve a su alcance… Más adelante tu hijo/a conseguirá aplaudir, quitarse los calcetines, pasar las páginas de un cuento, hacer construcciones, usar las tijeras, quitar un tapón de rosca, doblar un papel y también rasgarlo, pintar, apilar objetos, escribir….

La coordinación óculo-motora sigue siendo fundamental en nuestro día a día cuando somos adultos, pero es especialmente importante para el desarrollo normal de nuestros hijos e hijas y para el aprendizaje escolar, de ahí la importancia de estimularla y mejorarla.

9 Juguetes y actividades para mejorar la coordinación ojo-mano

Comprar puzzles para niños

Haciendo puzzles los niños mejoran la coordinación ojo-mano, entrenan la motricidad fina y aprenden a reconocer formas y colores. Al mismo tiempo ejercitan la concentración, la tenacidad,  la paciencia y la tolerancia a la frustración. Y al final se sienten orgullosos de sí mismos al verse recompensados con una fantástica imagen.

Al comprar puzzles adaptados a la edad y al desarrollo del niño es cuando este tipo de juegos despliega todo su potencial y aporta todas sus ventajas. Es aconsejable elegir el grado de dificultad adecuado para que resulten divertidos.

A la hora de comprar puzzles encontrarás una gran variedad. Por un lado se diferencian por el material del que están fabricados y los dibujos que muestran, y por otro por su grado de complejidad. A medida que aumenta la edad de los niños aumenta la dificultad de los puzzles, que viene determinada por factores como la cantidad y el tamaño de las piezas, el grado de detalle de la imagen y la composición cromática y la calidad.

Dónde comprar puzzles online para niños

Juguetes para encajar

Los encajables de formas son un juguete tradicional que gusta mucho a los niños. Se trata de ir encajando las diferentes formas en el espacio destinado para ello. Hay también encajables en los que el bebé debe ir cogiendo la figura con la forma que corresponde a cada hueco e introducirla; este tipo de encaje le resulta al pequeño especialmente agradable porque además oye el ruido de la pieza al caer.

Dónde comprar puzzles online para niños

Juegos de apilar y de construcción

A partir de los 12 meses de edad las construcciones resultan muy divertidas para los niños. Apilar y formar torres se convierte en uno de sus juegos favoritos… y no digamos después el derrumbarlas.

Observarás como tu hijo/a progresa y es capaz de hacer construcciones cada vez más altas, utilizando un mayor número de bloques. A medida que crezca le irás ofreciendo construcciones con piezas de menor tamaño (siempre adecuadas a su edad).

Dónde comprar puzzles online para niños

Juegos de puntería

Hay juegos que no pierden vigencia, como son por ejemplo los que ponen a prueba la puntería de los niños y niñas: Ensartar anillas, bolos, dianas (con dardos magnéticos)… Este tipo de juegos, además de mejorar la coordinación ojo-mano, contribuyen a ampliar la capacidad de tu hijo/a para realizar movimientos precisos y rápidos. También permiten ejercitar la vista de una forma mucho más sana que frente a una pantalla.

Son juegos que acostumbran a desarrollarse al aire libre, lo que permite a los niños socializar, organizar pequeñas competiciones o retos y entender la importancia del trabajo en equipo y de la competición sana.

Dónde comprar puzzles online para niños

Juegos de pesca

Otro clásico que gusta mucho a los niños y que sirve para desarrollar varias habilidades y capacidades son los juegos de pesca, que se componen generalmente por varias piezas imantadas y una o dos cañas de pescar.

Los juegos de pesca mejoran la coordinación óculo manual, ya que se requiere de precisión en los movimientos para poder pescar. También benefician el desarrollo de la musculatura de hombros, brazos y manos, necesarios para la escritura.

Por otro lado favorecen la perseverancia (al tener que lograr un objetivo) y prolongan los periodos de atención. Y además, si se juega en compañía, ayudan a fomentar el respeto de los turnos de juego.

Dónde comprar puzzles online para niños

Laberintos

Los laberintos son uno de los pasatiempos preferidos de los niños. Consisten en encontrar el camino correcto para llegar al destino propuesto, y para ello se tienen que ir sorteando caminos sin salida. Se trata de un juego indicado para niños/as a partir de los 6 años, edad en la que ya son capaces de aceptar y entender las reglas en los juegos y buscar salidas y tienen además la capacidad motora suficiente para resolverlos.

Laberintos los hay de todos los niveles. A medida que veas que el niño o la niña va consiguiendo la solución de algunos, puedes hacer que vaya avanzando hacia los más complicados. Es una cuestión de práctica.

Los laberintos, además de favorecer la motricidad fina y la coordinación ojo-mano, ayudan a tu hijo/a a tener persistencia y a que aumente su nivel de concentración. Ejercitan la mente y el ingenio y enseñan a los chavales a enfrentarse a los desafíos y a resolver problemas mientras se divierten.

Dónde comprar puzzles online para niños

Seguir líneas

Puedes dibujar líneas que sigan diferentes formas y trayectorias en un papel, en una pizarra o en el suelo (usando tizas que se borran luego fácilmente). Una vez hechas las líneas se le puede pedir al niño que las siga con la palma de la mano, con el dedo índice, que las repase con una tiza o con un rotulador, o que las cubra con pegatinas o con piedrecitas.

Dónde comprar puzzles online para niños

Juegos malabares

Los juegos malabares consisten en mantener el control sobre uno o varios objetos, o actuar sobre dichos objetos mediante lanzamientos, recepciones, manipulaciones y golpeos. Son adecuados para todas las edades, y para los niños son muy divertidos y altamente motivantes. Además de mejorar la coordinación, ayudan a conseguir una mayor concentración y a incrementar los reflejos.

Dónde comprar puzzles online para niños

Actividades artísticas

Evidentemente, cualquier tarea que conlleve en sí pintar, recortar, pegar, dibujar, colorear… es especialmente importante. Este tipo de actividades, además de favorecer la coordinación ojo-mano, promueven la creatividad y con ellas los niños y niñas disfrutan un montón.

Dónde comprar puzzles online para niños

¿Por qué sentimos nostalgia?

¿Por qué sentimos nostalgia?

Nuestro mundo emocional nos permite múltiples experiencias, entre ellas la nostalgia: un viaje añorado hacia nuestro pasado.

A finales del siglo XVII, un estudiante de medicina llamado Johannes Hofer notó una extraña enfermedad que afectaba a los mercenarios suizos en el extranjero. Entre sus síntomas había fatiga, insomnio, latidos irregulares del corazón, indigestión, y la fiebre era tan fuerte que los soldados a menudo tenían que ser dados de baja. Como descubrió Hofer, la causa no era una alteración física, sino un anhelo intenso por su tierra de montaña. Acuñó el término nostalgia, del griego “nostos” (regreso a casa), y “algos” (dolor o anhelo).

Al principio, la nostalgia se consideraba una aflicción particularmente suiza

Algunos médicos sostenían que el sonido constante de los cencerros en los Alpes generaba un trauma en los tambores del oído y el cerebro. Los comandantes prohibieron a sus soldados cantar canciones suizas tradicionales por temor a que eso los llevara a la deserción o el suicidio.

¿Por qué sentimos nostalgia?

Conforme la migración aumentó en el mundo, se observó la nostalgia en varios grupos. Resultó que cualquier persona separada de su lugar natal durante mucho tiempo era vulnerable a la nostalgia.

¿Por qué sentimos nostalgia?¿Por qué sentimos nostalgia?

A principios del siglo XX, los profesionales ya no la ven como una enfermedad neurológica, sino como una enfermedad mental similar a la depresión. Los psicólogos de la época especularon que representaba dificultades para dejar ir la infancia, o incluso un anhelo de volver al propio estado fetal.

¿Por qué sentimos nostalgia?

Pero en las siguientes décadas, la comprensión de la nostalgia cambió de forma significativa. Su significado se hizo más amplio que el hecho de añorar la tierra o un anhelo general por el pasado. Y más que una terrible enfermedad, empezó a verse como una experiencia conmovedora y agradable.

Quizá el ejemplo más famoso de esto fue captado por el escritor francés Marcel Proust, describió como el degustar una magdalena que no había comido desde la infancia desencadenaba una cascada de cálidas y poderosas asociaciones sensoriales.

¿Por qué sentimos nostalgia?

¿Qué provocó una inversión en nuestra visión de la nostalgia?

Parte de este cambio tiene que ver con la ciencia. La psicología se alejó de la teoría pura y se volcó a una observación empírica más cuidadosa y sistemática. Los profesionales advirtieron que muchos de los síntomas negativos podrían haber sido simplemente correlacionados con la nostalgia en vez de ser su causa.

Y, de hecho, a pesar de ser un estado emocional complejo que puede incluir sentimientos de pérdida y tristeza, la nostalgia generalmente no provoca en la gente un humor negativo. Por el contrario, al permitir el recuerdo de experiencias significativas y gratificantes que compartieron con otros,  puede aumentar el bienestar psicológico.

¿Por qué sentimos nostalgia?¿Por qué sentimos nostalgia?

Estudios han demostrado que inducir nostalgia en la gente puede ayudar a aumentar sus sentimientos de autoestima y pertenencia social, fomentar el crecimiento psicológico, e incluso hacer que actúen más caritativamente,

Así que, en lugar de ser una causa de angustia mental, la nostalgia puede ser una manera restaurativa de hacerle frente. Por ejemplo, cuando la gente experimenta estados emocionales negativos, suele usar naturalmente la nostalgia para reducir la angustia y restaurar el bienestar.

¿Por qué sentimos nostalgia?¿Por qué sentimos nostalgia?

Hoy parece que la nostalgia está en todas partes. Es en gran medida porque los anunciantes han descubierto lo poderosa que es la nostalgia como técnica de márketing.

¿Por qué sentimos nostalgia?

Es tentador pensarla como  un signo de quedarnos atrapados en el pasado, pero no es así como funciona. La nostalgia nos recuerda que nuestras vidas pueden tener sentido y valor, y nos ayuda a encontrar la confianza y la motivación para hacer frente a los desafíos del futuro.

Imagen de portada: Pixabay

Verano azul | Capítulos

Verano azul | Capítulos

Bea, Desi, Javi, Quique, ‘Piraña’ y Tito son una pandilla que veranea con sus padres en Nerja, un pueblo de la Costa del Sol. Allí conocen a Pancho (un chico del pueblo que trabaja como repartidor de leche), a Julia (una pintora) y a Chanquete (un viejo pescador que vive en un barco). La serie ‘Verano Azul’ rememora el retrato de la juventud de la época y de la realidad social de la España de los 80.

Para la generación nacida en los setenta esta serie es sin duda un referente cultural. Sus personajes dejaron huella en el imaginario colectivo, y aún hoy se recuerdan algunos de sus momentos más destacados y el vocabulario que ésta popularizó.

Si ‘Verano Azul’ caló tan hondo en la sociedad española fue porque sus episodios iban más allá de lo que podría parecer. No eran sólo el recuerdo de las aventuras de una pandilla de jóvenes durante sus vacaciones, sino que eran el reflejo de un país que, en ese momento, justo después del 23-F y antes de la victoria del partido socialista en las elecciones de 1982, todavía se debatía entre el pasado (la oscuridad) y el futuro (la modernidad). Podríamos decir que ‘Verano Azul’ simboliza la Transición.

En la serie se planteaban cuestiones que preocupaban a la sociedad del momento, temas espinosos que ya no lo son tanto. Los niños y niñas podían salir solos, les era permitido explorar su entorno con ropa cómoda y chanclas.

Para los niños de la época la serie ‘Verano Azul’ fue un acontecimiento crucial en sus vidas. Estaban ante un nuevo discurso que probablemente verían articularse en un futuro no muy lejano. Es normal que cause tanta nostalgia, pero de la buena; de la que nos hace disfrutar.

Argumento

La serie ‘Verano Azul’ relata las aventuras de un grupo de jóvenes que, durante sus vacaciones de verano en una localidad de la Costa del Sol, forman una pandilla. El grupo principal de protagonistas lo forman cinco chicos y dos chicas de edades diferentes, entre los ocho y los diecisiete años aproximadamente, y dos adultos (una pintora joven y un viejo marinero ya retirado).

Verano azul | Capítulos

Cuándo y dónde se rodó la serie ‘Verano Azul’

El rodaje de ‘Verano Azul’ se realizó durante 16 meses (entre finales de agosto de 1979 y diciembre de 1980. Tuvo lugar en dos localidades granadinas (Motril y Almuñécar) y en dos malagueñas (Nerja y Vélez-Málaga).

Verano azul | Capítulos

Cuándo se emitió por primera vez en televisión

‘Verano Azul’ fue una serie costosa tanto en tiempo como en dinero. Tardo unos tres años en estar lista para ser mostrada al público (entre escritura del guion, búsqueda de localizaciones, rodaje y montaje).

Los 19 capítulos (de aproximadamente una hora de duración cada uno) se emitieron por primera vez en la primera cadena de RTVE entre el 11 de octubre de 1981 y el 14 de febrero de 1982. Se televisaba un episodio cada domingo por la tarde.

Posteriormente la serie ‘Verano Azul’ se ha vuelto a emitir en varias ocasiones.

Personajes principales

Verano azul: El Casting | RTVE Series:

Chanquete | Antonio Ferrandis | Viejo marinero que vive en La Dorada, un barco de pesca habilitado como casa en tierra cerca de un acantilado.

Julia | María Garralón | Es una pintora solitaria que pasa sus vacaciones en el pueblo. En el capítulo «La sonrisa del arco iris» se revela el motivo de su soledad.

Pancho García | José Luis Fernández | Pancho nació en el pueblo y vive con sus tíos, ya que sus padres fallecieron. Trabaja como repartidor de una tienda de alimentación que sus tíos regentan y es el personaje de la pandilla con más personalidad.

Javi | Juanjo Artero | Javi lidera la pandilla. Es orgulloso e independiente, y a menudo choca con su padre que defiende la mano dura y los viejos valores.

Bea | Pilar Torres | Bea es la hermana de Tito, y es la «guapa» del grupo. Durante toda la serie Javi y Pancho se disputan su amor.

Desi | Cristina Torres | Desi es la amiga inseparable de Bea. Es hija de padres separados, algo que en la época era toda una novedad. Por eso «semejante escándalo» es comentario habitual entre los padres del resto de chicos del grupo.

Tito | Miguel Joven | Tito, que en realidad se llama Francisco, es el más pequeño de la pandilla y es el hermano de Bea. Cuando comenzó el rodaje en el que daba vida al personaje de Tito, Miguel Joven tenía sólo 6 años y medio. En la serie es compañero inseparable del Piraña.

Piraña | Miguel Ángel Valero | Su nombre es Manuel (sus padres le llaman Manolito), pero le llaman Piraña por su pasión por comer. Manuel es ingenioso y culto, y compañero inseparable de Tito.

Quique | Gerardo Garrido | Quique es el mejor amigo de Javi, y en cuanto a edad está entre los dos chicos mayores (Javi y Pancho) y los dos pequeños (Tito y Piraña). Es un personaje algo desdibujado. Se sabe que tiene una hermana menor que él, pero no llegó a formar parte de la pandilla.

Personajes secundarios

Agustín | Manuel Tejada | Agustín es el padre de Tito y Bea. Es un hombre tranquilo y que siempre está abierto al diálogo con sus hijos.

Carmen | Elisa Montés | Carmen es la madre de Bea y Tito.

Javier | Manuel Gallardo | Javier es el padre de Javi. Es un hombre autoritario cuyo mayor interés son los negocios.

Luisa | Helga Liné | Luisa es la madre de Javi.

Jorge | Carlos Larrañaga | Jorge es el padre de Desi. Sólo interviene en un capítulo, «El visitante».

Pilar | Concha Cuetos | Pilar es la madre de Desi. Está separada de su marido, Jorge. Como curiosidad en la serie ‘Farmacia de guardia’ (1990-1995), dirigida también por Antonio Mercero, estos dos actores son los protagonistas y están divorciados.

Cosme | Manuel Brieva | Cosme es el padre de Piraña.

Nati | Ofelia Angélica | Nati es la madre de Piraña.

Enrique | Fernando Hilbeck | Enrique es el padre de Quique.

Mercedes | Concha Leza | Mercedes es la madre de Quique.

Frasco | Fernando Sánchez Polack | Frasco es el dueño del bar al que suele ir Chanquete a beber lingotazos y a jugar al dominó. Es también uno de sus mejores amigos. En un capítulo, cuando piensa que han matado a Chanquete, llega a hacer uso de la fuerza escopeta en mano.

Buzo | Antonio P. Costafreda | Es un amigo de Chanquete, y se caracteriza por su constante tristeza y su resignación cansina.

Epifanio | Roberto Camardiel | Epifanio es el alcalde del pueblo. Casi siempre lo vemos fumando puros habanos.

Don José | Emilio Rodríguez | Don José es el médico del pueblo.

Mari Luz | Esther Gala | Mari Luz es la tía de Desi. Vive con su hermana Pilar y su sobrina y no soporta a su cuñado.

Floro | Lorenzo Ramírez | Floro es un policía municipal.

Barrilete | Ricardo Palacios | Barrilete es otro policía municipal. Es orondo y bonachón.

Capítulos de la serie ‘Verano Azul’

Capítulo 1 | El encuentro | Se emitió el 11 de octubre de 1981 | En el primer capítulo de la serie todos ellos se conocen en una situación difícil de la que surgirá una amistad que hará de ese verano el más importante de sus vidas.

Julia es una pintora joven y solitaria. Es viuda, y llega en verano a Nerja buscando tranquilidad. Allí conoce a un grupo de chicos que pasan sus vacaciones. Más tarde todos ellos conocerán a Pancho, un chico del pueblo que trabaja como repartidor en la tienda de sus tíos con los que vive. Por último conocen a Chanquete, un viejo marino retirado.

Entre todos ellos se crea un vínculo de amistad y forman una pandilla muy especial. En un principio Pancho y Javi rivalizan por conquistar a Bea, una de las chicas del grupo, hasta que Javi queda atrapado en unas rocas y Pancho se arriesga para salvarlo. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 2 | No matéis mi planeta, por favor | Se emitió el 18 de octubre de 1981 | Cuando Tito y Piraña encuentran numerosos peces muertos en la playa van corriendo a decírselo a Chanquete.

El viejo marino cree que el desastre es obra de una fábrica de productos químicos que contamina el río cada cierto tiempo. Van juntos al ayuntamiento a comunicárselo al alcalde para que envíe una queja a la fábrica. A raíz de este suceso los chicos crean una patrulla de limpieza bajo el lema «Operación planeta limpio», con el objetivo de dar ejemplo de civismo y concienciar a la gente de que no se debe ensuciar la playa. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 3 | A lo mejor | Se emitió el 25 de octubre de 1981 | Los chicos están hartos y  molestos por las imposiciones y castigos de sus padres y deciden hacer algo. Pactan hacer una huelga y mantenerse en silencio ante todo lo que les digan sus progenitores. Pero este método no les funciona y los castigos se repiten.

Tras cambiar varias veces la táctica sin obtener resultados se les ocurre la idea de hablar al revés. Finalmente, tras acabar todos en comisaría por un incidente acaecido en la playa, los padres se arreglan con sus hijos. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 4 | Beatriz, mon amour | Se emitió el 1 de noviembre de 1981 | Bea se enamora de Rafa, un chico mayor que ella. Juntos van a pasear en la moto que él tiene.

Javi y Pancho, que están celosos, hacen todo lo posible para que no estén a solas y boicotear las citas de la pareja. Por otro lado a los padres de Bea les preocupa que su hija salga con un chico mayor y le prohíben salir con él, cosa que la joven no acepta. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 5 | La sonrisa del arco iris | Se emitió el 8 de noviembre de 1981 | Julia está triste, la lluvia la deprime y se encierra en su casa sin salir ni responder a las llamadas de los chicos cuando van a buscarla. Más tarde el que va en su búsqueda es Chanquete, que entra en la casa rompiendo un cristal.

Julia le cuenta su drama personal: su marido y su hija murieron en un accidente de coche dos años atrás, en un día de lluvia. Chanquete intenta consolar a Julia y le recuerda que, después de la tormenta, siempre aparece el arcoíris. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 6 | El visitante | Se emitió el 15 de noviembre de 1981 |El padre de Desi viene a verla y le trae una motocicleta de regalo. Desi se ilusiona con una posible reconciliación de sus padres. Pero la relación, lejos de arreglarse, se deteriora cada vez más y ella sufre.

Mientras, Tito y Piraña piensan que tener padres separados es un chollo porque te hacen muchos regalos y piensan en la manera de hacer que sus padres se separen. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 7 | Pancho Panza | Se emitió el 22 de noviembre de 1981 | Tito le cuenta a Pancho un sueño que tuvo su hermana. En el sueño un jinete enmascarado la rescataba de unos bandidos. Pancho piensa en hacer realidad el sueño de Bea consiguiendo un caballo y haciendo el papel del jinete enmascarado. Pancho sufre un accidente y no puede repartir leche. Los chicos deciden ayudarle a hacer el reparto. Pancho, al no poder ir en bici, va montado sobre un burro y, por ese motivo, recibe el mote de «Pancho Panza», cosa que no le hace ninguna gracia. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 8 | La bofetada | Se emitió el 29 de noviembre de 1981 | Javi acude con sus padres a la casa de un hombre adinerado. Lo que su padre pretende es hacer buenos negocios con ese millonario, pero Javi lo avergüenza y recibe una bofetada.

Javi, resentido con su padre por ello, acude a Chanquete para que le preste dinero y marcharse de allí. Chanquete le da el dinero con una condición: debe pasar la noche en casa y reflexionar antes de coger el dinero. Javi pasa todo el día meditando qué hacer. Por la noche, una conversación entre sus padres le hace cambiar su decisión. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 9 | Eva | Se emitió el 6 de diciembre de 1981 | Un grupo de hippies abandona la playa quedándose sola una chica llamada Eva. Javi se siente atraído por la belleza de la chica y le ofrece quedarse con ellos en la pandilla.

Eva ha sido abandonada por su novio porque está embarazada y ha decidido tener el bebé pese a la negativa de este. Los chicos, Julia y Chanquete se vuelcan con ella para que no se sienta sola. Mientras, Tito y Piraña tienen la curiosidad de saber cómo se hace para tener un niño sin estar casados y recurren a Chanquete para que se lo explique. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 10 | La navaja | Se emitió el 13 de diciembre de 1981 | Al pueblo llegan unos gamberros haciendo mucho ruido con sus motos y rompiendo cabinas telefónicas. Más tarde, otros dos chicos se pelean en la taberna de Frasco y uno de ellos utiliza una navaja. Los chicos de la pandilla andan enfadados entre ellos. Parece que un clima de enemistad sobrevuela sobre el pueblo.

Chanquete se pone enfermo y Julia se encarga de ser su enfermera y cuidarlo. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 11 | Las botellas | Se emitió el 20 de diciembre de 1981 | En la playa de Cala Chica, mientras los chicos están jugando, aparece una botella con un mensaje dentro. El mensaje dice: «Beatriz, te amo». Cada día aparece en la playa una botella con el mismo mensaje.

Bea está encantada, mientras que los chicos, celosos, investigan quién es el que lanza las botellas. Javi descubre que es Pancho quien las tira y le intenta apartar de Bea. Al final, la playa es escenario de una bochornosa reyerta entre ambos muchachos. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 12 | La última función | Se emitió el 27 de diciembre de 1981 | Los chicos se disfrazan para jugar a las representaciones en el refugio de Javi. Pancho tiene que hacer el reparto y, cuando se dirige hacia el refugio, pasa por delante de una casa abandonada y ve una figura asomada en una ventana. Asustado, corre a contárselo a los demás y juntos van a explorar la casa. Allí, Bea ve la figura del hombre en un espejo, se asusta y todos salen corriendo.

Más tarde, los chicos acuden de nuevo con Chanquete y descubren a un hombre, hijo del antiguo dueño, que es un gran ilusionista venido a menos que desea invitar a todo el grupo a cenar y realizar su última función. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 13 | La cueva del Gato Verde | Se emitió el 3 de enero de 1982 | Los chicos se van solos de excursión a la Cueva del Gato Verde en unas montañas del entorno de pueblo. Pancho se queda atrapado en la cueva mientras hacía exploración. Quique y Desi van en busca de Chanquete y de la Guardia Civil para que lo rescaten.

Como tardan en llegar, Javi se interna en la cueva atado a la cuerda de la cometa de Piraña y rescata a Pancho. Sin quererlo, los chicos descubren unas cuevas nuevas de gran valor geológico. Pancho logra un beso de Bea mientras ésta le cura sus heridas. Por su parte, Chanquete ayuda a Julia a vender unos cuadros y evitar de esta forma que ella se marche por falta de dinero. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 14 | El ídolo | Se emitió el 10 de enero de 1982 | Bruno (Gonzalo), un apuesto cantante, ídolo de las jóvenes, llega al pueblo para grabar un vídeo musical.

Bea y Desi están locas con él y los chicos están celosos. Bruno es famoso, guapo y rico, pero no es feliz y, por las noches, se refugia en la playa, donde conoce a Chanquete y le confiesa la realidad de su vida. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 15 | El guateque de papá | Se emitió el 17 de enero de 1982 | Enrique, el padre de Quique, hace esfuerzos por acercarse a su hijo e integrarse en el grupo de los chicos para que le consideren un amigo y así conocer mejor a su hijo, pero todos sus esfuerzos son inútiles. En vista de su fracaso, termina pidiendo consejo a Chanquete.

El resto de padres están de acuerdo con la iniciativa de Enrique y deciden hacer lo mismo con sus hijos. Preparan un guateque y van todos juntos, pero los padres se divierten más en ese ambiente que los hijos. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 16 | No nos moverán | Se emitió el 24 de enero de 1982 | Promovisa es una constructora que pretende realizar un gran proyecto construyendo bloques de apartamentos, pero no pueden llevarlo a cabo porque en medio de la superficie construible se encuentra el huerto de Chanquete y su barco, La Dorada. Se reúnen con Chanquete para hacerle una importante oferta económica, pero Chanquete se niega a vender su terreno y abandonar su casa.

La constructora compra entonces a algunos hombres del pueblo para que estos amenacen a Chanquete con el fin de que acabe vendiendo, pero no consiguen nada. Más tarde, unas excavadoras llegan para demoler La Dorada, pero se encuentran con Julia y los chicos, que al grito de «No nos moverán», consiguen defender el barco. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 17 | La burbuja | Se emitió el 31 de enero de 1982 | Bea es arrastrada por la corriente al quedarse dormida en su colchoneta mientras el resto de la pandilla juega en el arenal de Cala Chica. La llaman a gritos. La chica despierta, se arroja al agua y ve no puede llegar a la orilla. Un extraño personaje de largos cabellos y poblada barba, vestido solo con unos tejanos y un extraño tatuaje en la espalda, con el que ya se habían topado antes Chanquete (mientras cultivaba su huerto) y Julia y Desi (mientras leían poesía), aparece de repente, se lanza al mar y le salva la vida.

Cuando Javi y Quique hablan con él, éste les cuenta que viene de otro planeta y que está esperando a que sus compañeros vuelvan en «La Burbuja» para recogerlo. Los del manicomio, que lo estaban buscando durante todo el día, aparecen en Cala Chica y lo atrapan. Todos creen que es un loco, pero lo cierto es que unas extrañas luces aparecen sobre el agua esa noche, de lo cual son testigos Chanquete y su amigo el farero. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 18 | Algo se muere en el alma | Se emitió el 7 de febrero de 1982 | Chanquete se hace un reconocimiento médico y le dicen que su corazón está delicado y que tiene que ingresar en el hospital para hacerse unos análisis, pero él se niega a hacerlo. Más tarde Julia se entera, por boca de «El Buzo», de la enfermedad de Chanquete y va a hablar con él convenciéndole para que se haga esos análisis.

A los pocos días Chanquete sale del hospital pareciendo estar recuperado, pero muere al día siguiente. Pancho acude raudo a avisar a la pandilla, que estaba jugando a pelota en Cala Chica. Todo el pueblo está muy triste llorando la muerte de Chanquete. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Capítulo 19 | El final del verano | Se emitió el 14 de febrero de 1982 | La pandilla está triste por la muerte de su amigo Chanquete y por el final de las vacaciones. Deciden hacer algo especial por ser el último día juntos, pero no se les ocurre nada y se aburren. Julia les invita a su casa a merendar y, después, van a ver cómo se llevan La Dorada. En su lugar plantan un árbol.

Al día siguiente, todos se despiden hasta el año próximo. Julia es la última en marcharse del pueblo, dejándole a Pancho un regalo muy especial. ▷Ver capítulo (se abrirá en ventana aparte)◁

Salud mental de niños y adolescentes

Salud mental de niños y adolescentes

Cómo saber si un niño tiene un trastorno mental

Se acostumbra a considerar que los problemas de salud mental en niños son casos aislados, cuando la realidad es que afectan a casi  2 de cada 10 niños del mundo ¿Cómo podemos favorecer la salud mental en la infancia y en la adolescencia? Tal y como recoge el informe sobre salud mental infantil y juvenil, las dificultades en el desarrollo emocional e intelectual del niño se pueden relacionar con resultados insuficientes en materia de educación, con relaciones sociales poco satisfactorias, con el uso incontrolado de sustancias, con estilos de vida inestables, con conductas de autolesión y con una baja autoestima.

Los niños y jóvenes con problemas de salud mental tienen más riesgo de sufrir enfermedades con el paso del tiempo y de tener complicaciones a nivel físico. Una vez el niño muestre indicadores de salud mental deficitaria, la atención inadecuada o la no intervención puede alargar el sufrimiento del pequeño y limitar la oportunidad de disfrutar de una vida satisfactoria, e incluso puede hacer que el trastorno se cronifique.

Una salud mental deficitaria tiene consecuencias para toda la familia.

Especialmente para el núcleo de convivencia. La familia ha de hacer frente a cargas que provocan situaciones de inseguridad, de miedo, de estrés y de angustia. La presencia de trastornos mentales en la infancia puede comportar costes económicos hasta diez veces superiores a la edad adulta, y las consecuencias emocionales negativas pueden retroalimentarse y agravar los efectos que el propio trastorno tiene en el niño.

Salud mental de niños y adolescentes

Han aumentado las patologías conductuales y de comportamiento perturbador.

Uno de los problemas de los jóvenes es que les cuesta aceptar la frustración porque viven sobreprotegidos. Aunque los jóvenes han crecido pensando que la norma de vida es el placer y el bienestar, lo más normal es tener problemas y saber sobreponerse. La reacción de cada individuo ante situaciones desestabilizadoras dependerá de sus capacidades para afrontarlas y seguir adelante: la resiliencia. Si no el niño o el joven es susceptible de desarrollar una problemática de salud mental.

Salud mental, salud emocional.

Cuando se habla de salud mental en muchas ocasiones estamos hablando de salud emocional. Ansiedad, estrés, depresión, impulsividad, fobias, predisposición a una conducta violenta… son ejemplos de salud mental que también es salud emocional, o más bien de falta de salud mental y emocional.

En niños y adolescentes esto provoca comportamientos que son emoción en estado puro, sin ningún tipo de regulación o censura que permita disimular la fogosidad del momento. Cuando se juntan en una misma persona problemas denominados mentales (que muchas veces son emocionales) con la energía y la efervescencia de la adolescencia, nos podemos encontrar delante de un coctail casi explosivo muy difícil de contener dentro de un aula ordinaria. Por ello a menudo requiere una atención especializada.

¿Cómo definimos qué es salud mental en términos de niños y jóvenes?

Habitualmente cuando tenemos que definir la salud lo hacemos más a partir de la enfermedad que no propiamente de la salud. Somos más hábiles a la hora de definir cuando aparece la enfermedad que no lo que es el estado de salud.

Técnicamente una buena salud no implicaría sólo la ausencia de enfermedad, sino que implicaría un bienestar completo en todas las áreas de vida: personal, escolar, social, familiar, con los iguales.

Basándonos en esto encontraríamos a muy pocos niños con buen estado de salud. Se ha acabado por definir que tenemos niños y jóvenes saludables cuando aun con las dificultades que pueden tener, también emocionales, estas no interfieren y les permiten que funcionalmente puedan adaptarse y conseguir sus objetivos de vida.

La enfermedad aparece cuando realmente tenemos a un niño que no puede conseguir sus objetivos de vida.

Tanto puede ser a nivel de relaciones sociales como a nivel escolar, como si el niño no es capaz de mantener una conducta apropiada allí donde pertoca, o cuando el chaval tiene una forma de pensar que le hace interpretar al entorno como amenazador… En definitiva cuando hay una interferencia. La interferencia es lo que delimita, es la línea que separa al sano del enfermo.

A la hora de tratarlos, los problemas emocionales son los que generan más dificultades. Básicamente porque la emoción acostumbra a ser lo que los psicólogos menos conocen. Se conoce muy bien que pasa a nivel de pensamiento o que pasa a nivel de conducta, pero la emoción es como un cajón de sastre. Y  es la clave, el intentar tener niños y jóvenes que se autorregulen emocionalmente para que puedan afrontar lo que la vida les irá deparando.

Salud mental de niños y adolescentes

 

Dentro de la falta de salud mental en los niños podemos diferenciar dos grandes grupos.

  • Por un lado los niños que realmente tienen una enfermedad mental: un trastorno psicótico, una esquizofrenia o un trastorno depresivo mayor. Que requieren un tipo de intervención mucho más desde la técnica y desde los conocimientos que se tienen de la psicopatología.
  • Y por otro lado un grupo cada vez más grande, y que curiosamente son los que generan más dificultades: casos que aparentemente son menos graves pero que funcionan muy mal en el día a día. Son niños que quizás tienen un problema mental aparentemente menos importante,  pero que esta interferencia hace que no consigan sus objetivos de vida. Esto explicaría el incremento de las autolesiones, de las tentativas de suicidio, de los problemas de conducta… cosas de las que hace 25 años no teníamos los índices que tenemos hoy.

Creemos que los niños no sufren.

Estamos en una sociedad en la que nos parece que los niños no sufren. Y en realidad en el proceso de desarrollo del niño, hablando ya de la primera infancia, estamos delante de un ser vulnerable.

En la sociedad actual la vulnerabilidad se considera un hándicap, algo anómalo, cuando en realidad es algo inherente al ser humano. Sobre todo cuando un niño está en proceso de construirse como persona, con todo el proceso que comporta desarrollar su propia identidad. El niño en cada etapa evolutiva de su desarrollo psicoafectivo se encontrará con momentos y situaciones de pequeñas crisis, que a veces parece que es algo que la sociedad no tolera tanto.

Y en determinados casos nos encontramos con chicos y chicas en los que precisamente no es tanto un tema de patología grave o de trastorno mental, sino situaciones en las que cuesta aprender a autorregularse, aprender a tolerar la frustración, aprender a adquirir habilidades y maneras de afrontar determinadas situaciones que la vida les depara… y es una labor que en ocasiones no se ha de desarrollar sólo desde un marco de terapia, sino que desde la familia, desde la escuela, desde el contexto en que vive y convive el propio chico o chica se ha de facilitar que pueda aprender a autorregularse, que el niño consiga tener fortaleza emocional.

Salud mental de niños y adolescentes

Cómo los niños expresan su malestar.

Los niños expresan su malestar y el sufrimiento emocional básicamente a través del cuerpo y a través de la conducta, y nuestra labor y nuestro reto es llegar a las emociones.

Describir qué es educación emocional es complicado. Las  emociones son como se ha dicho antes una especie de cajón de sastre, y en muchas ocasiones las inferimos a partir de la conducta. Cuando vemos a un niño por ejemplo dando golpes podemos pensar que siente rabia, cuando le vemos llorar pensamos que está triste… En  psicología el estudio de las emociones, aún siendo clave, ha quedado siempre en segundo plano porque a él es difícil acceder.

Las emociones se educan desde bien pequeñitos.

Hay padres que se preguntan “¿cómo puedo educar a mi hijo para que tolere la frustración?” Pues la respuesta es que desde el mismo momento de nacer, no hay una edad en que se pueden empezar a imponer los límites. Sobre la capacidad de autorregular la conducta se podría hablar desde las primeras relaciones de vida, sobre todo el bebé con la madre y el entorno de la familia. Ahí el niño comienza a interiorizar maneras de afrontar el malestar y situaciones frustrantes.

La frustración y los límites se adquieren a partir de conductas, cuando el padre o la madre dice no, cuando el niño es pequeño llora y tiene rabietas. Si esta conducta se va adquiriendo, cuando el pequeño crece y llega a la edad adulta ante una frustración gestionará mejor los sentimientos. Eso no significa que la persona no sienta la rabia.

Educar las emociones no es anularlas.

Hay quien entiende que educar emocionalmente significa anular la expresión de las emociones, y no es así. Se trata de gestionarlas de forma que nos permita afrontarlas.

Se dan casos de niños con muchas dificultades emocionales que lo que hacen es autolesionarse, o niños que tienen alteraciones de conducta y acaban montando un número monumental por situaciones que aparentemente no son tan graves. ¿Qué podemos hacer con estos niños para que aprendan a autorregularse?

Probablemente les hemos de empezar a dar experiencias de frustración, y esas experiencias las empiezan a dar los padres, la escuela, la sociedad. La convivencia siempre implicará que va a haber unos límites. Y si esos límites los padres (que son los primeros que están en contacto con el bebé o el niño) no los empiezan a ejercer, el cerebro pierde los momentos críticos en los que le es fácil hacer esta autorregulación. Esto no quiere decir suprimir las emociones. Se trata de aprender a identificarlas y darse cuenta de qué es realmente lo que nos está molestando en cada momento.

Salud mental de niños y adolescentes

Caso práctico: adolescente al que deja la novia.

Pensemos en un joven en edad adolescente al que le deja la novia. ¿Cuál es aquí el problema? No es tanto el que le haya dejado la novia (eso es algo que ya ha pasado) sino cómo tolera y acepta la situación.

Hace 25 años, cuando esto ocurría, quizás nos encerrábamos en la habitación y nos hartábamos a llorar, pensábamos que nunca jamás encontraríamos a otra como ella… luego la vida nos acaba demostrando que eso no es así. Y en cambio ahora es curioso que hay chicos y chicas que lo que hacen ante esta situación es autolesionarse, o hacer una sobre ingesta de medicamentos.

Y la impresión que tenemos no es que los niños de hoy genéticamente hayan nacido peor, sino que el problema es que las experiencias de frustración que tienen son menos que las que se tenían antes. Hemos ido hacia un modelo en el que con los menores todo lo hemos hecho demasiado paternalista, la sobreprotección es un problema. Es verdad que en la infancia los niños son vulnerables, es la etapa más vulnerable de la vida. Pero el que los niños sean vulnerables no quiere decir que no los tengamos que exponer a lo que después en la vida adulta se irán encontrando.

Que tenemos que hacer antes de llegar a la adolescencia.

Antes de que el chico o la chica lleguen a la adolescencia ¿qué mecanismos se han ido activando durante todo ese recorrido para ayudar a este niño? La ventaja que tenemos con la escuela es que permite hacer una prevención universal.

Al colegio van todos los niños: vengan de la familia que vengan y sean de la clase social que sean. Cualquiera que sea su contexto todos los niños van a una escuela, y desde P3 ya se pueden comenzar a identificar algunas señales de riesgo y empezar a tomar medidas.

Cuando en un niño se identifican estas señales existe la posibilidad de que se le pueda derivar a un CDIAP (Centros de Desarrollo Infantil y Atención Precoz), donde se hará una diagnosis del niño, en la medida que sea posible, y se empezará a hacer una intervención precoz.

La intervención que se hace en los 2-3 primeros años es la que se considera más eficaz, y el problema es que en salud mental infanto-juvenil siempre vamos un poco tarde

Cuando ya ha pasado la etapa preescolar y el niño llega a la edad de 6 años, y hasta los 18, está la opción de que si se identifica que hay problemas sugerentes de enfermedad mental el menor sea atendido en un centro de salud mental infanto-juvenil. Son centros que están integrados por equipos multidisciplinares, con psiquiatras, psicólogos clínicos, en algunos también encontramos enfermería y trabajadores sociales.

El niño es él y su contexto.

En la atención a la infancia en casos de enfermedad mental, a diferencia del mundo adulto, se han de tener en cuenta diferentes variables.

No sólo podemos tener en cuenta la variable “niño”. La variable “contexto” en los niños tiene mucho más peso que en los adultos. Al hablar de contexto hablamos de familia, de niños que a veces tienen padres con enfermedad mental que no pueden ejercer las funciones parentales de manera correcta. Es por tanto fundamental identificar las señales de riesgo social que hay en el entorno de ese menor.

Y si no se interviene en el contexto es muy difícil solucionar los problemas. Cuando un niño es muy pequeño (5-6-7 años) se podría decir que el 75-80% de la intervención en realidad se hace con los padres. Si que se trata al niño, pero para modificar como se relaciona el niño con sus padres se empieza trabajando con los progenitores. El hecho de que el menor tenga detrás una familia con unas características determinadas es un factor pronóstico en un sentido o en otro. En la adolescencia la cosa cambia, porque el peso del menor ya no es tan pequeño.

Pero sí que hay datos preocupantes. Uno de cada cuatro menores de 16 años (o uno de cada 5, dependiendo del año) deja la escolarización antes de finalizar la ESO, la Enseñanza Secundaria Obligatoria, y aquí es donde empieza la exclusión social.

Cuando una enfermedad mental empieza de niño, si no se interviene de manera correcta y eficaz, y a todos los niveles, tenemos ya los primeros factores de lo que puede ser un adulto con exclusión social.

Cuando un menor llega a un hospital de día.

Tenemos a un menor que llega a un hospital de día ¿Qué recorrido ha hecho ese niño y en qué situación llega?.

Al hospital de día llegan mayoritariamente chicos y chicas en edad adolescente, a partir de los 12 años. Cuando llegan vienen derivados por profesionales de los centros de salud mental infanto-juvenil, ya se les ha hecho un diagnóstico y están atendidos (y atendidas también sus familias). Cuando se opta por el hospital de día es que el chico o la chica no pueden seguir una normalidad absoluta en su día a día. La mayoría ya hace tiempo que llevan en la mochila malestar y problemas a nivel de adaptación, sobre todo escolar.

Llegados a este punto la adolescencia dificulta el hecho de acercarse a estos chicos, y tratar con ellos es siempre un reto.  Porque la adolescencia en sí es una etapa de crisis en la que se ha de construir definitivamente la identidad y el joven ha de acceder al mundo adulto. La mayoría son jóvenes que han tenido una evolución patológica.

¿Qué entendemos por evolución patológica?

Significa que son chicos y chicas que probablemente han tenido problemas en su entorno desde bien pequeños, algunos de ellos en el contexto escolar y también en el contexto familiar, pero han podido llegar a un equilibrio. En general han sufrido problemas de autorregulación emocional que se trasladan al plano conductual.

Cuando un niño tiene problemas de autorregulación a veces se detecta, y es verdad que se identifican muchos indicadores que no podemos definir propiamente como psicopatológicos, pero que si son indicadores de dificultades a la hora de adaptarse al entorno para la etapa en la que el niño se encuentra evolutivamente hablando. Niños movidos, inquietos, que a veces en el contexto del aula les cuesta adaptarse y relacionarse con iguales, les cuesta jugar a un juego aceptando las normas.

Son niños que empiezan con problemas conductuales, puede ser externalizándolos y a veces también internalizándolos, en el sentido de que nos podemos encontrar con cuadros de más inhibición. Más tarde o más temprano estos problemas afectan al desarrollo de las actividades educativas y académicas. Y cuando los chicos llegan a la adolescencia y pubertad, y sobre todo el paso de la escuela primaria a la ESO, es cuando esta situación que hasta ese momento se ha podido ir gestionando, explota.

Cómo se siente el joven.

Cuando un joven llega al hospital de día se siente enfadado, frustrado, fuera de sitio…

Tratar con adolescentes es difícil, es muy diferente de cuando se trata a un niño, porque cada día desconoces que te puedes encontrar. A veces los jóvenes tienen cosas muy escondidas, grandes virtudes y grandes potenciales, aunque sólo se vea la fachada que ha alarmado al instituto, que ha hecho que sea expulsado, y que hace que la familia sea crítica. Ante todo hay que pensar que detrás de toda esa aparatosidad hay sufrimiento, y  emociones que seguramente el propio adolescente es incapaz de reconocer.

El primer encuentro determina mucho todo lo que será la alianza y el vínculo terapéutico de este chico o chica que ha de acudir por su cuenta al hospital de día. Por ello es importante que se sienta reconocido y que vea que se comprende su sufrimiento, no loando de la forma en que lo está expresando sino sugiriéndole que hay otras formas de resolver este malestar.

Siempre que es posible se incluye a la familia, porque se parte de la idea de que detrás del chico hay unos padres, unos familiares, unos vínculos y unas experiencias que han hecho que esta persona se forme a nivel emocional. La mayoría de veces las familias son las primeras que están abatidas, culpabilizadas, se sienten responsables. Por eso se plantea como un trabajo en equipo. La familia es necesaria en la terapia y el adolescente también la necesita, aunque a veces es el primero que pide que no vengan.

El suicidio ya es la primera causa de muerte entre los jóvenes.

En el informe sobre salud mental infantil y juvenil se lee: “concretamente en la población adolescente y joven con problemas de salud mental puede haber un retraso en la petición de ayuda y de tratamiento, derivado de los sentimientos de autodesvalorización y discriminación que comporta el estigma”. Sería como el autoestigma.

¿Cómo podemos conseguir que esta mirada de desvalorización que el adolescente tiene sobre sí mismo se modifique? Es algo que va muy ligado a la autoestima. Hemos de poner la atención en dos aspectos:

■ Uno es si el adolescente está preparado para identificar cuando realmente tiene un problema emocional, o cuando empieza a tener estos sentimientos que si no gestiona bien le pueden acabar llevando a situaciones tan graves como los datos que se tienen de suicidio en población adolescente. Es algo que implica comenzar a trabajar también con los adolescentes aspectos que quizás no se han planteado: saber gestionar el estrés, el día a día, aprender a resolver los propios problemas, aprender habilidades interpersonales… todo esto es algo que se puede enseñar y que sirve de apoyo para que no aparezcan estos sentimientos.

■ Y por otro lado también se ha de preparar al adolescente de manera que, igual que él sabe que cuando tiene una herida determinada ha de acudir al hospital, que sepa que cuando tiene unos síntomas determinados (como podría ser una depresión) puede pedir la ayuda pertinente, que es algo que se puede tratar y que se puede curar.

¿Y esto quién lo debería enseñar? Evidentemente no es viable que haya psicólogos y psiquiatras en cada instituto para hacer esta labor. Tampoco sería un modelo sano, saludable ni recomendable.

La clave estaría en empezar a formar a formadores: igual que dentro del profesorado seguramente hay alguien que se ocupa de formar en prevención de drogodependencias, en cada instituto y en cada centro de enseñanza debería haber algún referente, pero del mundo educativo, que pudiese formar a los otros en cosas tan claras como por ejemplo identificación de señales de riesgo de conductas suicidas, o identificación de trastorno depresivo.

De esto ya ha habido alguna experiencia que se ha hecho a nivel de comunidad. Por ejemplo hace unos años, en Sabadell, dentro de un programa que se hizo de prevención de la depresión se intento formar a la comunidad. En todos los institutos, en segundo ciclo de ESO, lo que se hizo fue formarles en qué era la depresión, qué síntomas tenía, se les enseñó a identificar y se hizo de una manera cercana y divulgativa, para que ellos mismos pudiesen aprender a identificar estos síntomas en ellos mismos y en los compañeros. Eso a la vez permitió identificar que un porcentaje pequeño de escolares tenían síntomas depresivos, y de estos un porcentaje más pequeño tenía un trastorno depresivo al que ni los padres ni ellos mismos le habían puesto nombre. Y a partir de ahí se pudo tratar.

¿Qué transmiten los jóvenes cuando se autolesionan? ¿Es una forma de llamar la atención?

En algunos casos sí, pero no siempre. Cuando se produce esa conducta, lo que hemos de intentar ver es la funcionalidad de ese comportamiento: ¿qué función tiene en ese caso concreto? Y en ocasiones sí que esa funcionalidad puede ser disminuir o liberarse de un cierto malestar emocional. Ocurre en chicos que han vivido situaciones duras y que eso les produce un malestar emocional muy grande, y utilizan la autolesión como una forma física de hacerse daño. De esta manera su atención queda centrada en un dolor físico, que es más soportable que un dolor psicológico.

Pero cada vez más se aprecia un perfil diferente: el del chico o chica que se autolesiona porque no sabe gestionar de manera correcta dificultades cotidianas. Y al hablar de dificultades cotidianas no quiere decir que hayan vivido situaciones traumáticas, sino situaciones triviales: discusiones, por ejemplo no se les deja salir por primera vez a la discoteca… y a partir de ahí responden haciéndose una autolesión.

También se da el caso de algunos grupos o tribus urbanas que utilizan la autolesión como una forma de pertenencia y de identidad, es el caso de los “emos”.

Todo esto hace que las profesionales que se dedican a tratar con niños y adolescentes tengan que personalizar mucho los tratamientos.

Cómo aborda el terapeuta los trastornos mentales en niños.

¿Cómo aborda un terapeuta cuando le llega un joven que se ha autolesionado o que ha expresado tentativas de quitarse la vida?

En primer lugar se han de tener en cuenta las emociones del joven. La emoción se ha de validar siempre y siempre se ha de aceptar, evidentemente que el chico o la chica para tener esa conducta se ha sentido mal. Se les ha de hacer ver que en la vida todo tiene vuelta atrás menos una cosa, que es la muerte. Cuando ocurre una situación que uno no prevé es como cuando hay una granizada y no llevas paraguas, quedas empapado.

Se trata de darles estrategias dirigidas a que contemplen otras alternativas que no sea la autolesión. Y empoderarlos, no hablándoles desde un tono paternalista:”¡Pobrecito, eres un enfermo mental!”. No es eso lo que necesitan oír. Lo que necesitan escuchar es: “Mira, estás aquí porque no has sabido gestionar bien la situación y te vamos a enseñar estrategias para que cuando te ocurra algo parecido sepas hacerlo mejor”.

Y esas estrategias no son muy complicadas. Son lo que todos haríamos: hablar, quedar con alguien e ir a dar un paseo y charlar, ponerte a realizar una actividad que te guste… es lo que todos hacemos cuando tenemos momentos en los que nos sentimos angustiados.

¿Por qué hay ahora más adolescentes que antes que se autolesionan?

Aquí las redes sociales nos gastan una mala pasada. Conductas que quizás antes quedaban más en el anonimato, ahora tenemos la gran desgracia de que las redes sociales permiten que se haga una gran difusión y que los adolescentes “acaben normalizando” algunas de estas conductas, no las ven como estigmatizadoras. Cosa que en otros momentos no era así.

De hecho últimamente se ha hablado mucho del juego de la Ballena Azul y como se han producido diversos casos. Esto complica este asunto cada vez más, porque contenidos que atentan contra la salud mental en internet encontraremos muchos. Ahora se ha puesto de moda el juego de la Ballena Azul, pero si buscas en Google “¿cómo suicidarte?” nos encontramos con un número de entradas increíble.

Delante de estos fenómenos estamos algo indefensos. Cada día se abren páginas que hacen apología de los trastornos alimentarios. Hacen apología a la anorexia, a la muerte, al suicidioLos jóvenes que se atienden con problemas de salud mental son una población más vulnerable que el adolescente que, dentro de estar en plena adolescencia, está con un cierto equilibrio emocional. Y con el agravante de que en la mayoría de los casos los padres no están formados en estos medios, y tienen un desconocimiento del uso que hacen sus hijos de internet y de las redes sociales. Está claro que existe un problema de alfabetización en medios digitales, y también tenemos el problema de que los adolescentes tampoco han sido alfabetizados, por mucho que se diga que son nativos digitales.

Proteger desde la primera infancia.

Para prevenir problemas lo fundamental es proporcionar a los niños factores protectores desde la primera infancia. Y esto se hace a partir de las relaciones familiares.

Tener un hijo es educarlo, estar con él, irle ayudando a adquirir y a internalizar una manera de vivir, de gestionar las emociones, de gestionar las dificultades del día a día. Es algo que se entrena con las pequeñas situaciones de la vida cotidiana como puede ser el hecho de llegar a casa y tener que hacer los deberes, ahí los padres, uno u otro, han de intentar estar. O cuando el niño no puede ir, o hacer, o tener todo lo que quiere. La omnipotencia infantil y el deseo del placer ha existido siempre, y los niños no pueden crecer pensando que todo lo pueden. La sociedad, y sobre todo la familia, han de ir ayudando al menor a madurar y a adaptarse.

 

Fuente: «L’ofici d’educar» de Catalunya Ràdio (30/05/2017) / Imágenes: flickr greg westfall.